SEGÚN CAF

Tres son los elementos “importantes” a nivel regional y global que podrían favorecer a la actividad económica de Uruguay en un contexto mundial “complejo”. Estos son: el acuerdo del Mercosur con la Unión Europea (UE), la posible aprobación de la reforma previsional en Brasil y la estabilidad de los indicadores económicos en Argentina.

Así lo indicó el representante en Uruguay del Banco de Desarrollo de América Latina-CAF, Germán Ríos, quien señaló que “pareciera que el entorno global está más complicado, pero la región no tanto”. Sin embargo, advirtió que esta previsión debe “analizarse con cautela”.

En el marco del Foro Económico, organizado esta semana por la Cámara de Comercio Uruguayo-Alemana y apoyado por CAF, Ríos se refirió a la situación económica global y dijo que es “un momento muy complicado”, fundamentalmente por la desaceleración de las principales economías (Estados Unidos, China y Europa).

Si bien reconoció que la desaceleración estará acompañada de un impacto comercial, que afectará a los países emergentes, explicó que el aumento de expectativas de recorte de tasas por parte de la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos favorecerá a estos mercados, entre ellos a Uruguay.

“Vamos a tener una política monetaria más laxa por parte de Estados Unidos”, indicó y sostuvo que eso otorgará mayor atractivo para los inversores que deseen dirigirse a los mercados emergentes.

No obstante, Ríos explicó que consideran que el reto para América Latina y Uruguay es el dinamismo interno de la economía. “El entorno doméstico es el que tiene que ayudar y no el sector externo” indicó. Es por esto que sugirió “pasar la macroeconomía a la microeconomía, preservando las ganancias obtenidas durante el boom de las materias primas”.

Un nuevo reporte elaborado por BBVA Research -servicio de estudios del banco-, reflejó que “el crecimiento mundial continúa en una suave senda descendente”, explicado principalmente por “la debilidad de la industria y de las exportaciones, debido a las tensiones comerciales”.

Es por esto que la institución financiera revisó a la baja su previsión del Producto Interno Bruto (PIB) mundial en 0,1 puntos porcentuales, hasta un 3,3% para 2019 y 2020.

El informe destacó además que el impacto de las tensiones comerciales “ya es palpable” y señaló que -en un entorno global de baja inflación- los bancos centrales pudieron “reevaluar su política”.

A pesar de una menor presión sobre los tipos de cambio, desde BBVA Research revisaron a la baja las proyecciones de crecimiento de América Latina y alertaron que “los riesgos siguen siendo bajistas”, relacionados al proteccionismo, la recesión de Estados Unidos y el apalancamiento de China.