El tipo de cambio inició la semana con una caída marginal de 0,01%, con un mercado que estuvo bastante operado pero que mantuvo la escasa volatilidad de precios ante la intervención del Banco Central (BCU) en el lado vendedor.

El promedio de compraventas interbancarias de la víspera fue de $ 28,434, con lo que acumula un descenso de 0,15% en agosto y un incremento de 16,85% en 2015.

En tanto, el Banco República (BROU) mantuvo inalterada la pizarra en $ 28,05 la compra y $ 28,85 la venta.

A través de las pantallas de la Bolsa Electrónica de Valores (Bevsa) se operaron US$ 20,1 millones.

De acuerdo a lo señalado por los operadores cambiarios consultados por El País, la jornada de ayer volvió a estar muy tranquila en cuanto a cantidad de negocios, como consecuencia de la reducida volatilidad y a la intervención del BCU.

De hecho, el precio máximo alcanzado fue de $ 28,50 y el mínimo $ 28,42, culminando la jornada en $ 28,44, desde los $ 28,46 en que había cerrado el viernes.

Los agentes agregaron que la autoridad monetaria apareció en la mañana nuevamente vendiendo divisas al contado —spot—, lo que "trancó" el mercado.

De todas formas, el Central solamente debió vender US$ 2,2 millones para contrarrestar la leve presión compradora.

En estos momentos, algunos bancos están teniendo problemas de liquidez, con lo que la presión compradora disminuye. Ayer, la tasa call —lo que deben pagar los bancos por préstamos en pesos entre sí a un día de plazo— se operó al 12%.

Central vendió US$ 2,2: