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Esta estrategia proviene de David Neiditch, propietario de un departamento en el barrio de Hell's Kitchen, quien intenta seducir a sus posibles compradores
Las ventas de viviendas en Manhattan han registrado uno de sus peores años. La alta oferta en el mercado ha provocado que quienes desean vender sus propiedades deban rebajar fuertemente sus precios u ofrecer importantes beneficios a sus posibles compradores.
Esta última estrategia es precisamente la que quiere utilizar David Neiditch, el propietario de un departamento de casi 1.400 metros cuadrados ubicado en el barrio de Hell's Kitchen y cuyo exorbitante precio alcanza los US$ 85 millones.
Debido al alto costo del inmueble, el vendedor intenta seducir a sus posibles compradores incluyendo como regalo pasajes para vuelos al espacio con Virgin Galactic, dos Rolls-Royce Phantom, un Lamborghini Aventador y dos asientos al borde de la cancha en el estadio de los Brooklyn Nets de la NBA.