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La Inteligencia Artificial permite al auto futurista decidir en cada caso si solo debe reprender al conductor o emitir una sanción

emol / gda

Los avances tecnológicos en la industria automotriz avanzan más rápido que el mejor de los “superdeportivos” y una prueba de ello es la empresa Ford acaba de patentar un vehículo autónomo capaz de cumplir funciones policiales como perseguir y multar a quienes cometan infracciones de tránsito.

La decisión de la firma se adoptó luego de los exitosos resultados obtenidos con estas nuevas tecnologías y que se han traducido, por ejemplo, en camiones de reparto sin conductor. Ahora la firma del óvalo quiere dar un paso más allá y generar las bases para, a futuro, producir un auto policial autónomo capaz de controlar el tráfico en las carreteras.

El documento, que ha sido desarrollado y presentado por Ford Global Technologies en la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos, propone un futurista vehículo que operará con la policía pero sin agentes en su interior, que será capaz de seguir y sancionar a infractores de tránsito gracias a sus sensores y radares.

Según revela el documento, el futurista auto policial estará dotado también de un moderno sistema de comunicación, en el que ya se trabaja, para conseguir una conexión directa con el resto de los vehículos. Esto le permitirá al auto policial comunicarse con el conductor infractor y entregarle en tiempo real la multa correspondiente.

Entre sus amplias capacidades el auto autónomo también contará con la posibilidad de consultar y transmitir información a la base de datos de la policía o comunicarse con cámaras de seguridad y radares de las carreteras a fin de recabar más información.

Por otra parte, la Inteligencia Artificial permite al "auto policial" decidir en cada caso si solo debe reprender al conductor o emitir una multa. De igual forma, podrá aprender rápidamente qué puntos de las autopistas presentan más exceso de velocidad de manera de reforzar el control en esas zonas.

Si bien nada asegura que este futurista vehículo llegue alguna vez a la línea de producción, lo cierto es que es una muestra más de las aspiraciones de Ford y las grandes empresas automotrices respecto del futuro que se avecina y el uso que se le podrá dar a las nuevas tecnologías.