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Gustavo Jiménez Pons ofreció pagar US$ 99 millones y pretende usarlo como taxi aéreo VIP, a un costo de US$ 20.000 la hora en su empresa "JBS Air Enterprise".

Un empresario mexicano llegó este jueves a la casa de transición del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para presentar una oferta de compra del avión presidencial que el izquierdista prometió vender desde su campaña electoral por considerarlo un lujo innecesario, reportó la prensa nacional.

El empresario Gustavo Jiménez Pons "ofreció pagar hasta 1.900 millones de pesos (unos US$ 99 millones) por el avión presidencial", reportó el diario Reforma.

La aeronave, que ha sido llamada José María Morelos y Pavón, nombre de uno de los héroes de la Independencia de México, está valuado en unos US$ 220 millones. Jiménez Pons pretende usarlo como taxi aéreo VIP, a un costo de US$ 20.000 la hora en su empresa "JBS Air Enterprise".

Rentaría el lujoso taxi aéreo a "presidentes de otros países que no tienen aeronaves privadas o a bandas de rock como los Rolling Stones", añadió a su vez el rotativo El Universal.

López Obrador ha dicho reiteradamente que no utilizará el avión presidencial, ni aviones privados.

El actual presidente Enrique Peña Nieto compró en 2016 la aeronave Boeing Dreamliner 787. La anterior había sido adquirida en 1988. Peña Nieto elevó aún más su precio al hacerle remodelaciones, tales como la instalación de sofisticados equipos de comunicación y un área especial para el descanso del presidente.

Desde su campaña, López Obrador le ofreció la aeronave con capacidad para unas 300 personas a Donald Trump.

Algunos analistas han dicho que la venta del avión sería una tarea difícil de concretar dado el reducido mercado. Sin embargo, cuando Jiménez Pons pidió una cita en las oficinas de López Obrador, el guardia ordenó al empresario a hacer fila en la calle como todas las personas que a diario llegan a la casa de transición a pedir favores, empleo o dinero.

Jiménez Pons fue candidato a la alcaldía de la Ciudad de México por un partido minoritario en 2006 y en el último periodo electoral fue aspirante a la presidencia por la vía independiente pero no logró cumplir con el número de firmas ciudadanas necesarias que establece como requisito la autoridad electoral.