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Trump llega a la cumbre de la OTAN acosado por el avance del proceso de juicio político

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El presidente Trump arribando ayer a Londres para la cumbre de la OTAN. Foto: AFP

OFENSIVA DEMÓCRATA

“Es una vergüenza absoluta lo que le están haciendo a nuestro país”, dijo el mandatario republicano, en alusión al proceso en el Congreso.

El presidente Donald Trump llegó anoche a Londres para participar hasta mañana miércoles en la cumbre de la OTAN con motivo de su 70 aniversario.

El Air Force One aterrizó en el aeropuerto londinense de Stansted, al norte de la capital británica, desde donde Trump y su mujer, Melania Trump, fueron trasladados hasta Winfield House, la residencia del embajador estadounidense en Londres ubicada en el céntrico Regent’s Park.

Hoy martes, Trump tendrá un primer encuentro con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en Winfield House antes de reunirse por la tarde con el presidente de Francia, Emmanuel Macron.

Trump insiste en que los miembros de la OTAN hagan mayores aportes a la organización y cumplan con el 2% de su PIB hacia el año 2024, mientras que Macron quiere ir más allá y asegurar que haya una estrategia clara y se cumpla el objetivo de garantizar la paz y la estabilidad en Europa frente a la amenaza terrorista.

En el vuelo hacia Londres, Trump señaló en su cuenta de Twitter que antes de que él fuera elegido presidente, unos pocos países cumplían con sus obligaciones financieras, pero que desde que él asumió el poder, más naciones han aumentado sus aportes y la OTAN ha incrementado el gasto en 130 mil millones de dólares (118.209 millones de euros).

Hoy martes, Donald y Melania Trump se trasladarán al Palacio de Buckingham para participar en la recepción que ofrecerá la reina Isabel II para dar la bienvenida a los líderes que participarán en esta cumbre, con la que recordarán la fundación de la Alianza Atlántica para garantizar la seguridad europea y de América del Norte después de la II Guerra Mundial.

Críticas a demócratas.

Antes de partir hacia Londres, Trump arremetió contra los demócratas por llevar a cabo un juicio político para destituirlo. “Es una vergüenza absoluta lo que le están haciendo a nuestro país”, dijo el mandatario republicano, en alusión al proceso en el Congreso con miras a su destitución, “que, para empezar, es un engaño”.

“Estamos luchando por el pueblo estadounidense”, recalcó al partir de la Casa Blanca para la cumbre de la OTAN en Londres.

La Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, comienza mañana miércoles el debate legal para saber si los hechos alegados contra el presidente son lo suficientemente graves como para justificar un juicio político.

Si bien Trump viene diciendo desde hace semanas que todo el procedimiento es una “caza de brujas”, o incluso un intento de golpe de Estado, el mandatario estaba particularmente enojado el lunes porque los “demócratas radicales de izquierda” organicen una audiencia pública cuando él estará fuera del país para una cita “arreglada hace un año”.

Trump es acusado por sus opositores de abusar de su cargo al retener ayuda militar estadounidense a Ucrania para presionar a Kiev a abrir una investigación de corrupción contra uno de sus rivales electorales de 2020, el exvicepresidente demócrata Joe Biden.

El presidente republicano aseguró estar en su derecho al plantear un posible caso de “corrupción” por parte de Biden, cuyo hijo Hunter integraba la directiva de una empresa de gas ucraniana, y jura no haber ejercido ninguna presión sobre Kiev. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, negó de nuevo cualquier acuerdo de “toma y daca” con Trump por esta ayuda militar, en una entrevista publicada el lunes por varios medios internacionales, entre ellos Time, Le Monde y Der Spiegel.

Trump consideró que eso debería ser suficiente para probar su inocencia. “Si los demócratas radicales de izquierda estuvieran cuerdos, que no lo están, ¡se acabaría el caso!”, tuiteó. “Pero esto nunca terminará”, dijo luego a periodistas.

La pesquisa en el Congreso para un eventual juicio político de Trump se inició el 24 de septiembre con audiencias a puertas cerradas en tres comités de la Cámara baja.

A mediados de noviembre el proceso pasó a la fase pública, en la que varios testigos proporcionaron elementos inconvenientes para el presidente al Comité de Inteligencia.

Controlado por los demócratas, ese comité debería aprobar, en una votación hoy martes, su informe para luego trasmitirlo al Comité Judicial.

Este comité tomará las riendas del procedimiento de juicio político el miércoles.

La esperada pulseada con Macron

En la cumbre de la OTAN en Londres, Donald Trump competirá por el protagonismo con su homólogo francés, Emmanuel Macron.

En las dos últimas cumbres de la OTAN, Trump tuvo el protagonismo garantizado debido a sus ataques pasados a la Alianza Atlántica y a sus incesantes presiones para que Europa gastara más en defensa, pero en esta ocasión es probable que deba compartir los focos con Macron.

El presidente francés opinó recientemente que la OTAN se encuentra en “muerte cerebral” y abogó por centrarse menos en contribuciones financieras y más en la estrategia de la Alianza.

Cuando Macron se erigió en mediador informal entre Estados Unidos e Irán tras la cumbre del G7 en agosto, Trump dejó claro que no le gustaba esa búsqueda de liderazgo global del presidente francés.

Esas tensiones prometen salir a relucir en la reunión bilateral que mantendrán hoy martes en Londres Trump y Macron, donde airearán sus “prioridades diferentes para la Alianza”, según la Casa Blanca.

“El presidente Macron todavía está decidiendo qué es lo que quiere (de la OTAN)”, opinó el viernes una fuente oficial de Estados Unidos.

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