Propuso un sistema migratorio por méritos; el muro se hará “pronto”, dijo.

Donald Trump prometió anoche ante el Congreso estadounidense una reforma fiscal "histórica" y poner todo su empeño para "finalmente" hacer que se apliquen las leyes migratorias. Además, afirmó que "no podemos permitir" que Estados Unidos "sea un santuario" para terroristas, y prometió nuevas medidas con ese fin "pronto". También "pronto" comenzará la construcción del muro en la frontera con México, que será "un arma muy eficaz contra el crimen y las drogas".

"Debemos restaurar la integridad y el imperio de la ley en nuestras fronteras", dijo Trump.

El presidente comenzó su discurso condenando los recientes ataques y amenazas contra la comunidad judía y el asesinato de un inmigrante de India. Estos episodios, dijo, "nos recuerdan que aunque somos una nación dividida por la política, somos un país que se presenta unido en la condena al odio y al mal en todas sus formas".

Si Estados Unidos desea alcanzar sus objetivos tanto dentro como fuera de sus fronteras, "debemos reiniciar el motor de la economía", favoreciendo la acción de las empresas para que hagan negocios en el país y sea más difícil trasladarse al exterior, expresó el mandatario.

Horas antes de su discurso ante el Congreso, Trump aseguró que ha llegado "el momento" de impulsar una reforma para arreglar el sistema de inmigración del país, donde se calcula que residen 11 millones de indocumentados. "Este es el momento adecuado para una ley sobre inmigración siempre que haya voluntad de hacer concesiones en ambos lados", dijo durante un almuerzo con periodistas de las principales cadenas de televisión del país.

Anoche propuso al Congreso un nuevo sistema migratorio en Estados Unidos, basado en méritos y en la capacitación de los candidatos, y frenar el acceso al país de personas con baja capacitación laboral.

"Si pasamos del actual sistema de inmigración de personas con baja capacitación, y adoptamos un sistema basado en mérito, tendremos muchos beneficios: ahorraremos dólares, elevaremos los salarios y ayudaremos a las familias en dificultades —incluyendo familias de inmigrantes— a ingresar a la clase media", expresó.

En otro momento de su alocución, la primera ante el Poder Legislativo desde su llegada a la Casa Blanca el 20 de enero, Trump adelantó que su equipo económico "está desarrollando una reforma fiscal histórica".

Esa reforma reducirá la carga impositiva para que las empresas mejoren su competitividad "y promoverá enormes reducciones de impuestos para la clase media".

El presidente insistió en una de sus más polémicas promesas de campaña, la eliminación y substitución del sistema de seguros médicos conocido como Obamacare.

Trump, sin embargo, pretende también insistir en un llamado a la unidad. "El tiempo de pensar pequeño se acabó. El tiempo de las peleas triviales quedó atrás", sostuvo.

En las cuestiones bélicas, Trump dijo que "trabajará" con los países aliados para "extinguir" al grupo yihadista Estado Islámico.

El discurso de anoche venía precedido del anuncio del lunes de que aumentará en US$ 54.000 millones el presupuesto militar. Estados Unidos es el país que tiene el mayor presupuesto en defensa del mundo, con una cifra que asusta, US$ 651.000 millones, más que la suma de los siete países que le siguen en el ranking: China US$ 145.000 millones, Rusia US$ 58.900 millones, Gran Bretaña US$ 52.500 millones, India US$ 51.100 millones, Japón US$ 47.300 millones y Francia US$ 47.200 millones. Para bajar a tierra estas cifras siderales, solo el aumento del presupuesto militar que propone Trump para Estados Unidos equivale a todo el PBI de Uruguay.

La primera comparecencia de Trump en el Congreso se convirtió en un campo de batalla sobre la nueva política exterior de Estados Unidos. El presidente y su esposa, Melania, invitaron a dos viudas de policías californianos abatidos en 2014 por un inmigrante clandestino. Los demócratas invitaron a un iraquí detenido en el aeropuerto JFK de Nueva York el mismo día que se ponía en vigor un decreto de Trump que cerraba las fronteras a refugiados y ciudadanos de siete países musulmanes.

El presidente Donald Trump aseguró ayer martes en una entrevista que su predecesor, Barack Obama, está detrás de las filtraciones y de las protestas contra él, aunque reconoció que tiene un problema transmitiendo su mensaje. En una entrevista con el programa matinal Fox & Friends, Trump se refirió a las protestas contra legisladores republicanos y a las filtraciones de informaciones sobre su equipo de gobierno: "creo que el presidente Obama está detrás de ellas, su gente está sin duda detrás".

Trump aseguró que tienen "algunas ideas" sobre quién o quiénes están filtrando información a la prensa sobre el funcionamiento de la nueva Casa Blanca o de algunas agencias del Gobierno y reiteró que aún tienen a "gente de otros Gobiernos, de otras Administraciones".

Trump también se refirió a una información de la publicación Político que asegura que el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, revisó los teléfonos de su personal para confirmar que las filtraciones no venían de su departamento.

"Sean es un buen ser humano. Yo lo habría hecho de otra manera, pero estoy de acuerdo con ello", aseguró Trump.

Reconoció que su "mensaje no es bueno" y se da una calificación "C o C+" (un aprobado raspado), pero considera que tiene una A (sobresaliente) en "esfuerzo" y "logros".

"Cuando veo historias sobre que Donald Trump no ha llenado centenares de puestos (de funcionarios públicos en agencias clave), eso es porque, en muchos casos, no queremos llenar esos puestos", indicó. EFE

Los republicanos alertaron que el plan de Trump de recortar en más de una tercera parte los fondos para el departamento de Estado, podría enfrentar fuerte oposición en el Congreso. "Esto está muerto al llegar", dijo el senador Lindsey Graham.

Un promedio de encuestas de Real Clear Politics situó la aprobación de Trump en un 44%, una cifra relativamente baja para un presidente con poco tiempo en el cargo. Trump dijo a Reuters que había heredado "un desastre total".

AFP, EFE

DEBUT PARLAMENTARIOAFP, EFE