El presidente estadounidense aseguró que no puso al mismo nivel a los grupos fascistas y antifascistas que se manifestaron en Charlottesville.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo esta mañana que nunca quiso poner al mismo nivel a los grupos fascistas que se manifestaron en Charlottesville con las organizaciones antifascistas, sino que fue "tergiversado" por quienes difunden "fake news" (noticias falsas).

El martes, durante una improvisada conferencia de prensa en el lobby de la Torre Trump en Manhattan, el mandatario equiparó a los supremacistas blancos y a los manifestantes que los denuncian. Criticó a "la izquierda que atacó a la Alt right (derecha alternativa)", y sorprendió al decir que había gente "muy buena" en ambos lados.

Las repercusiones de sus dichos generaron una ola de rechazos, incluso dentro del partido Republicano, al que pertenece el presidente.

Ronna Romney McDaniel, quien dirige el Comité Nacional Republicano, dijo a ABC que "en Charlottesville los errores están claramente del lado del KKK y de los supremacistas blancos". los expresidentesGeorge H.W. Bush y George W. Bush publicaron un comunicado conjuntoen el que exigieron "rechazar el racismo, el antisemitismo y el odio bajo todas sus formas".

Incluso un integrante del gabinete de Trump, elde Asuntos de los Veteranos, David Shulkin,consideró un "deshonor" para los excombatientes estadounidenses que no se cuestione a los neonazis.

Shulkin, que es judío, dijo en una rueda de prensa en Nueva Jersey que los grupos de ultraderecha congregados el sábado en Charlottesville representan una "afrenta a los ideales estadounidenses", según recogió Efe.

Pero lo que hizo explotar a Trump fueron los dichos del senador y ex precandidato presidencial republicano Lindsey Graham.

El parlamentario afirmó que Trump "dio un nuevo paso atrás al sugerir que que existe equivalencia moral entre los supremacistas blancos, neonazis, KKK y gente como la señora Heyer", refiriéndose a Heather Heyer, la mujer que murió luego de que un simpatizante fascista atropelló a un grupo de personas que se manifestaban contra los ultraderechistas congregados en Charlottesville.

Trump decidió responderle a través de Twitter y acusó a Graham de falsear sus declaraciones, de decir una "mentira asquerosa" y de no poder superar su derrota en la interna republicana.

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Luego, afirmó que "el público está aprendiendo (cada vez más) que tan deshonestas son las noticias falsas. Ellos tergiversan totalmente lo que digo sobre el odio, la intolerancia, etc. ¡Vergüenza!"

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