Donald Trump y Hillary Clinton se lanzaron de lleno ayer martes en el estado de Florida, crucial para ganar las elecciones del próximo 8 de noviembre.

La candidata demócrata de 69 años va adelante en los sondeos a nivel nacional, con una ventaja de 5,1 puntos, según el promedio del grupo RealClearPolitics.

Pero el millonario republicano de 70 años promete sorprender y apuesta a que en la elección volteará los resultados de los sondeos.

Pocos estados son tan impredecibles como Florida, el tercero más poblado del país con una población de 20,2 millones de habitantes, que oscilan entre una y otra tendencia con muy poco margen entre los candidatos.

"Creo que hay que ganar Florida y creo que estamos ganándolo. Creo que estamos ganándolo en grande", insistió Trump ayer martes al canal Fox News.

El magnate neoyorquino, quien posee el complejo hotelero Mar-a-Lago en Palm Beach, gusta presentar a Florida como su segundo hogar.

Pero esa declaración de amor no parece detener la tormenta que se cierne sobre su campaña en este estado propenso a los huracanes. El más reciente promedio de sondeos de RealClearPolitics, le da una ventaja de 3,1 puntos a Clinton, que puede confiar en el apoyo del voto latino.

De su lado, Clinton cortejará a los electores en Coconut Creek y luego organizará una recaudación de fondos en Miami. Hoy miércoles seguirá en Florida, con actos en Tampa y West Palm Beach.

Consciente del peso de los latinos (14,9% de los votantes en este estado), Clinton fue entrevistada ayer martes en el programa de variedades El Gordo y la Flaca de Univision, la principal cadena en español de Estados Unidos.

ESTADOS UNIDOS 2016