LA MARCHA DE LA PANDEMIA

En España se están disparando los casos de COVID-19 entre los no vacunados y los más jóvenes. La incidencia subió a 368 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días y se disparó a 800 entre los no vacunados y los menores de 30 años, según datos del Ministerio de Sanidad.

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, advirtió que el incremento de contagios se debe, además de a la no vacunación, a que no se están observando como antes las medidas de prevención de contagio.

Simón reveló que la ocupación en las unidades de cuidados intensivos subió un punto desde el pasado viernes hasta el 7,8%, mientras que en las camas regulares de hospital es del 3%, frente el 2,6% de hace tres días y advirtió que si la incidencia sigue siendo muy grande, puede haber un impacto “importante” en los hospitales.

Según Simón, la evolución de la pandemia “la está marcando el programa de vacunación”, que en España avanza a un ritmo muy veloz, con más 3,9 millones de dosis inoculadas en la última semana. El 59% de la población ya tiene una dosis y el 45,9% las dos.

Ante el incremento de casos, algunas regiones reimplantaron restricciones, como la de Valencia, donde desde ayer lunes entró en vigor un toque de queda entre la 01.00 y las 06.00 horas.

También en Cataluña, la región más afectada y cuya situación Simón calificó de “realmente dramática”, el Gobierno regional acordó el cierre de todas las actividades a las 00.30 horas, así como una limitación de encuentros a diez personas.

Las nuevas limitaciones en Cataluña también impiden comer o beber en la vía pública.

“Contaba que habría un rebrote, pero nunca que fuera tan explosivo”, admitió el consejero del Departamento de Salud, Josep Maria Argimon. “Esta ola está afectando mucho a las personas más jóvenes”, agregó.

La edad media en la UCI se ha reducido en 13 años, desde los 63 años hasta los 50 de media, y los menores de 40 años representan el 25%, cuando anteriormente este porcentaje era del 4%.

Los asistentes al desfile militar del 14 de julio en los Campos Elíseos de París por la Fiesta Nacional francesa tendrán que llevar mascarilla y un certificado sanitario para poder acceder a las gradas.

El público podrá volver a presenciar el desfile por la gran avenida parisina después de que el año pasado, debido a la pandemia, el acto se vio reducido a una ceremonia sin espectadores en la Plaza de la Concordia.

Pero quienes asistan estarán obligados a llevar mascarilla y a presentar uno de los tres documentos que ya se han convertido en habituales: certificado de vacunación completa; test PCR o de antígenos reciente o prueba de que se ha pasado la enfermedad en un período reciente, detalló un comunicado de la prefectura de policía.

También habrá un límite al número de personas en las gradas que permitirán presenciar el desfile militar.

Francia vive un crecimiento de contagios, debido a la variante Delta, por lo que el presidente Emmanuel Macron anunció nuevas medidas.

Entre ellas dispuso que desde agosto será obligatorio presentar un certificado de vacunación o un test covid negativo para poder ingresar a restaurantes, cafés, centros comerciales, hospitales, aviones y trenes.

Asimismo, desde el 21 de julio, será obligatorio para todas las personas de más de 12 años presentar este certificado en los “lugares de ocio y cultura” que acojan a más de 50 personas, detalló Macron en un discurso retransmitido por televisión. (EFE, AFP y El País de Madrid)