URSULA VON DER LEYEN

La alemana Ursula von der Leyen consiguió ayer martes la aprobación de la Eurocámara para convertirse en la primera mujer presidenta de la Comisión Europea. Pese a contar con el apoyo de las principales familias proeuropeas -el Partido Popular Europeo (182 diputados), los socialdemócratas (154) y los liberales (108)-, que suman un total de 444, logró 383 votos a favor y 327 en contra.

Von der Leyen obtiene así el cargo con un resultado muy ajustado, con solo 9 votos más del mínimo necesario de 374 y por debajo de los números del presidente saliente de la CE, Jean-Claude Juncker, que obtuvo 422 sufragios en 2014.

Como jefa del ejecutivo de la UE, Von der Leyen estará a cargo de las negociaciones comerciales, la política económica y climática y decisiones antimonopolio que involucran a poderosos gigantes tecnológicos.

“La confianza que se depositó en mí es la confianza que se deposita en Europa. Su confianza en una Europa unida y fuerte, de este a oeste, de sur a norte”, dijo Von der Leyen, quien esta semana renunció al Ministerio de Defensa alemán.

“Es una gran responsabilidad y mi trabajo comienza ahora”.

Von del Leyen, quien está dispuesta a dar más tiempo al Reino Unido para negociar su salida de la UE, sostuvo que trabajaría “de manera constructiva” con cualquier nuevo primer ministro británico.

Sus planes incluyen convertir a Europa en el primer continente neutral con el clima para 2050, lanzar un Plan Verde en sus primeros 100 días en el cargo, convertir partes del Banco Europeo de Inversiones en un Banco del Clima e introducir un Impuesto al Carbono en las fronteras.

En tanto, la presidenta de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Annegret Kramp-Karrenbauer, sustituirá a Von der Leyen al frente del Ministerio de Defensa alemán. La decisión se filtró a medios como Welt y Der Spiegel poco después de que Von der Leyen fuese confirmada como nueva presidenta de la Comisión Europea.

Kramp-Karrenbauer, favorita de Angela Merkel como sucesora al frente de la CDU, lleva meses afrontando problemas para afianzarse como líder del partido ante las resistencias de ciertos núcleos conservadores.