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El piloto ocultó su depresión

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Andreas Lubitz (27), el copiloto que presuntamente estrelló de forma deliberada el avión de Germanwings, estaba de baja médica y en tratamiento psiquiátrico desde hacía tiempo, según informaron medios alemanes.

Entre los documentos hallados en los registros efectuados el jueves en sus domicilios se encontró una baja médica emitida por un neurólogo y psiquiatra, informa la edición digital del diario "Süddeutsche Zeitung". Según ese medio, Lubitz se había sometido durante bastante tiempo a varios tratamientos psiquiátricos, a cargo de distintos médicos, el último de los cuales le había emitido la baja que, según informó previamente la fiscalía de Düsseldorf, el copiloto había roto y presumiblemente ocultado a la compañía aérea.

El diario berlinés "Der Tagesspiegel" informa, por su parte, de que Lubitz, había seguido un tratamiento por depresión en la Clínica Universitaria de Düsseldorf.

En un comunicado, ese centro médico aclaró que efectivamente Lubitz había sido atendido ahí y que su última visita de produjo el día 10 de marzo.

Calificó no obstante de "incorrecto" que fuera para un tratamiento por depresión e indicó que fue para contrastar diagnósticos, sin dar más detalles.

En la inspección del domicilio de Lubitz no se halló una nota de suicidio o confesión, "ni había ninguna evidencia de un contexto político o religioso de lo que sucedió", agregaron.

Investigación.

En Francia, las autoridades dijeron que recuperaron entre 400 y 600 partes de cuerpos del sitio del accidente. No se hallaron cuerpos intactos y las pruebas de ADN serán la mejor manera de identificar los restos, dijo Patrick Touron, subdirector de la División de Investigación Criminal de la Gendarmería francesa, a periodistas en el lugar.

Los investigadores buscarán partes de los uniformes para intentar identificar a la tripulación, incluido a Lubitz.

La búsqueda en el terreno tiene además por objeto el de encontrar la segunda caja negra del avión, de la que solo se halló su carcasa. Para los expertos los registros de esta caja —todos los parámetros de vuelo— permitirán establecer con precisión qué ocurrió en el fatídico vuelo del 24 de marzo.

Los indicios recogidos de la primera caja negra hallada, la que contiene la grabación de los sonidos de cabina y las comunicaciones, permitió saber ya que Lubitz tuvo la voluntad de estrellar la aeronave. Por los ruidos que registró el dispositivo se deduce que el comandante del Airbus que había salido al baño, luego de intentar abrir sin éxito la puerta de la cabina la emprendió a golpes de hacha al percibir la situación de emergencia que estaban viviendo.

Testimonios.

"También yo he volado con él, lo recuerdo bien. Y también lo he dejado solo en la cabina de pilotaje para ir al baño", destacó Frank Woton, un piloto de Germanwings que conoció personalmente a Andreas Lubitz, autor de la tragedia que costó la vida a 150 personas.

Woton se hizo muy conocido en la redes sociales por la gran humanidad con la que recibió y tranquilizó uno a uno a los pasajeros de un vuelo suyo tras la tragedia en los Alpes franceses.

Una pasajera lo comentó en Facebook desencadenando una avalancha de reacciones afectuosas y despertando el interés de la prensa por este capitán de 48 años.

"Cuando volé con él me narró su adiestramiento y cómo fue feliz. Dijo que quería convertirse en capitán y pilotar vuelos de trayecto largo. Tenía un dominio muy bueno del avión, tenía todo bajo control. Por esto lo dejé solo en la cabina de pilotaje y fui el baño", destacó Woton al tabloide alemán Bild. Lubitz, en suma, no parecía un tipo extraño, ni se notaba alguna cosa en particular. "Soy feliz de ser piloto —aseveró Wolton al Bild—. Los pasajeros y la tripulación me confían sus vidas. Lo ocurrido ha terminó destroanzo una fuerte confianza que ahora debe ser reconstruida con esfuerzo". Wolton, que tiene dos hijos, está haciendo todo lo posible dentro de sus posibilidades. El miércoles (el día después de la tragedia) —narró al Bild— se presentó a trabajar a pesar que era su día libre. Y el jueves pasado le fue asignada la "línea de la muerte" Düsseldorf-Barcelona-Düsseldorf.

En ambos casos antes de decolar se colocó en medio del corredor, fuera de la cabina, y mirando a los pasajeros les dijo lo que muchos querían escuchar: "Los llevaré con seguridad a destino. Pueden estar seguros. Porque esta noche yo quiero nuevamente poder sentarme a la mesa con mi familia".

Palabras simples, con sentido común, que provocaron un aplauso espontáneo de los pasajeros: "Quisiera agradecer al capitán —escribió en Facebook uno de ellos— por haber comprendido lo que todos nosotros estábamos pensando".

La segunda caja negra aún guarda respuestas.

Son al menos diez las respuestas que la segunda caja negra, aún no encontrada, podrá dar a las tantas preguntas aún abiertas sobre el caso del Airbus 320 de Germanwings. La primera de las dos cajas negras, la CVR (Cockpit Voice Recorder), que registra ruidos y voces en la cabina del piloto, ya ha revelado bastante.

Cuando se encuentre la segunda caja negra, la FDR (Flight Data Recorder), los investigadores tendrán a disposición un gran número de datos. El chip de la FDR del A320 se encuentra en condiciones de registrar alrededor de mil parámetros, de los cuales es posible reconstruir toda la gestión de la situación en la cabina.

Se podrá saber, por ejemplo, qué avisos se activaron y los indicadores que se apagaron. Si la primera caja negra permitió establecer que el copiloto estaba vivo porque registró su respiración, la FDR dará la posibilidad de reconstruir todas sus acciones: las teclas que apretó y sin en un determinado momento aumentó la velocidad.

Lo que será difícil es saber si hizo saltar el interruptor en "bloqueado" para cerrar la puerta de la cabina poco después de que el comandante intentara abrirla con la introducción del código de cuatro dígitos.

Además de registrar las acciones de aquellos que están en los mandos del avión, la FDR también grabó todas las respuestas de la aeronave", es decir, las acciones correctivas implementadas por las computadas bordo del Airbus .

Por ejemplo, si el copiloto hubiera maniobrado el "joystick" (palanca de mando) para aumentar la velocidad de manera excesiva, la computadora habría intervenido para ralentizarla.

Otras respuestas podrán llegar desde la sincronización de dos cajas negras.

Es una operación que requiere en una semana promedio y que podrá dar resultados relevantes a la investigación.

Permitirá entender exactamente cómo fue la maniobra del descenso del copiloto: si lo hizo enseguida de que el comandante dejara la cabina o si tuvo algunos titubeos.ANSA

Novia confirma la enfermedad.

La novia del copiloto del Airbus A320, el alemán Andreas Lubitz, pudo haber confirmado a los investigadores que este sufría una "grave depresión", según señaló ayer el canal francés de información "iTélé". El canal televisivo, que no citó las fuentes de esa supuesta información, indicó que la novia fue interrogada anoche por los investigadores alemanes, ante quienes realizó esa confesión. El canal agregó que los padres de Lubitz serán interrogados por los gendarmes franceses ya que se encuentran en la localidad de Seyne-les-Alpes, cerca de donde se estrelló el aparato de la compañía Germanwings que hacía el trayecto entre Barcelona y Düsseldorf con 150 personas a bordo. El periódico alemán Bild informó que el copiloto había padecido depresión durante un período en el que interrumpió su entrenamiento hace seis años y estuvo un año bajo tratamiento psiquiátrico.

vea el videoAFP, ANSA, EFE, REUTERS

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