Publicidad

Militares copan favela en Río en redada contra bandas de narcos

Compartir esta noticia
Ciudad de Dios: ayer detuvieron a 38 personas e incautaron armas y drogas. Foto: AFP
Suspects are detained and handcuffed by Rio's Civil Police during a joint operation at "Cidade de Deus" (City of God) favela, in Rio de Janeiro, Brazil, on February 07, 2018. More than 3,000 soldiers deployed on Wednesday to provide backup to Rio's police during an operation at "Cidade de Deus" favela in the violent western zone of the city, to search and arrest suspects related to drug trafficking activities, official sources said. / AFP / MAURO PIMENTEL BRAZIL-FAVELA-OPERATION
MAURO PIMENTEL/AFP

LA OLA DE VIOLENCIA EN RÍO DE JANEIRO

El operativo se centró en Ciudad de Dios, a días del inicio del Carnaval.

Ciudad de Dios: ayer detuvieron a 38 personas e incautaron armas y drogas. Foto: AFP
VEA EL VIDEO. Foto: AFP

En víspera del inicio del Carnaval este fin de semana y en medio de una ola de violencia, el ejército brasileño copó ayer miércoles con unos 3.000 militares la favela Ciudad de Dios, en la zona oeste de Río de Janeiro, en una redada contra bandas de narcotraficantes.

La operación militar, que contó con apoyo de la policía carioca, se llevó a cabo una semana después de que choques entre traficantes y las fuerzas de seguridad en esta favela —famosa por la película que le dedicó en 2002 Fernando Meirelles— acabaran con tres muertos, uno de ellos aparentemente un cabecilla narco.

Y se dio también en el marco de un recrudecimiento de los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y traficantes en varios de estos asentamientos donde viven cerca de 1,5 millones de personas, un cuarto de la población de Río.

A primera hora de ayer miércoles, 3.000 militares de las tres fuerzas (tierra, mar y aire) rodearon Ciudad de Dios y bloquearon las arterias adyacentes, con cierre del espacio aéreo, en tanto que agentes de diversos cuerpos policiales ingresaban en la favela.

Un total de 38 personas fueron arrestadas, cinco de ellas menores de edad, informó la Secretaría de Seguridad de Río (Seseg) en un comunicado. También se decomisaron tres fusiles, cuatro pistolas, drogas y municiones.

El martes, las tres principales arterias de acceso a Río (Avenida Brasil, Linha Vermelha y Linha Amarela) fueron cerradas por una protesta de vecinos de las favelas del complejo de Maré, al norte de la ciudad, luego de que un adolescente de 13 años muriera al quedar atrapado en un enfrentamiento armado. En otro episodio en la violenta zona norte, una niña de tres años murió baleada el martes cuando estaba con sus padres, en una tentativa de asalto.

Esta fue la onceava operación conjunta de la policía con los militares, en las que fueron detenidas 266 personas y se decomisaron 30 fusiles de asalto, 31 pistolas y 2,5 toneladas de droga.

En simultáneo con el operativo en Ciudad de Dios, la policía desplegó sus fuerzas en la favela de la Rocinha, considerada la más grande y una de las más peligrosas de Río de Janeiro.

El espacio aéreo estuvo restringido para aeronaves civiles, si bien los dos aeropuertos de la ciudad funcionaron con normalidad, tanto el internacional de Galeao, como la terminal para vuelos nacionales de Santos Dumont.

El estado de Río de Janeiro vive una grave crisis de seguridad desde la celebración de los Juegos Olímpicos de 2016, que se ha recrudecido todavía más en el inicio de este 2018.

Debido a esta ola de violencia los militares fueron llamadas a fines de julio de 2017 para ayudar a contener el desborde en el estado de Río, donde los problemas de seguridad se ven agravados por una crisis económica que provoca atrasos en los pagos de salarios de miles de funcionarios, policías incluidos. Actualmente el gobierno brasileño tiene destinado en Río a unos 10.000 militares con la previsión de que permanezcan allí hasta finales de este año, pero su presencia no se ha traducido en una disminución de la violencia ni ha disuadido a los criminales.

El ministro de Defensa, Raul Jungmann, urgió la semana pasada a reformar un sistema de seguridad "fallido" en Brasil.

Muerte de menores por balas perdidas.

Unos 44 niños murieron víctimas de balas perdidas en Río de Janeiro durante la última década, y de ellos, 12 fallecieron en el último año, según un balance de la ONG Río de Paz divulgado ayer miércoles.

Los últimos dos casos ocurrieron este martes, cuando perdieron la vida Emily Sofía (3), en un intento de asalto mientras viajaba en coche con sus padres; y Jeremías Moraes (13), tiroteado en medio de un enfrentamiento entre policías y narcos en una favela del norte de la ciudad. "La muerte de un menor víctima de bala perdida es el lado más hediondo de la violencia de nuestro estado" señaló la organización. EFE

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad