El gobierno italiano afirmó ayer que investigará las responsabilidades por el polémico caso de las estatuas desnudas de los Museos Capitolinos de Roma que fueron cubiertas con paneles blancos en ocasión de la visita del presidente iraní, Hasan Rohaní.

Paolo Aquilanti, secretario general de Palacio Chigi —sede del gobierno— dijo que se inició una investigación interna para determinar las responsabilidades y brindar las aclaraciones necesarias sobre la organización de la visita de Rohaní al museo romano.

Por su parte, la superintendencia de Bienes Culturales negó haber tenido alguna intervención en la decisión. "Sobre el tema de las estatuas de los Museos Capitolinos cubiertas en ocasión de la visita del presidente iraní Rohaní deben preguntarle a Palacio Chigi. La medida no fue decidida por nosotros, fue una organización de Palacio Chigi y no nuestra", dijeron fuentes de la entidad. El ministro de Bienes Culturales, Dario Franceschini, afirmó ante los periodistas —con quienes habló al terminar hoy una visita de Rohaní al Coliseo— que lo ocurrido fue "una decisión incomprensible".

Las imágenes de las obras maestras de la escultura clásica tapadas —presuntamente por respeto al presidente Rohaní, cuya religión musulmana también impidió que se sirviera vino a los comensales de la cena organizada con las autoridades italianas— causaron grandes polémicas en los medios, los políticos y la opinión pública. Fuentes de prensa reportaron que la cobertura de las estatuas fue pedida por la delegación iraní, pero exponentes de la oposición afirmaron que "el respeto a otras culturas no implica la negación de la nuestra".

Entre tanto Rohaní visitó ayer otra de las joyas romanas, el Coliseo, en medio de un inmenso despliegue de seguridad que incluyó soldados con armas, controles de bolsos en el ingreso y vehículos de la Policía por doquier. La visita del mandatario iraní concluyó ayer; desde la capital italiana Rohaní partía para una visita similar en Francia. ANSA

Cubrieron esculturas