Publicidad

Mario, el niño de 12 años que viaja solo en la multitud que se dirige a Estados Unidos

Compartir esta noticia
Mario Castellanos, el niño de 12 años que viaja solo en la caravana. Foto: BBC.

HISTORIAS DE MIGRANTES

“Me querían meter en una pandilla”, dijo el niño hondureño que lleva días caminando.

“Usted bien sabe cómo se siente una madre sin su hijo, si yo no me quito de este mundo es porque el único que nos puede quitar es nuestro padre celestial”. Así relata su angustia Dilsia Murillo, de 36 años y madre de Mario Castellanos, un niño hondureño de 12 años que se fue solo en la caravana de migrantes que buscan entrar a Estados Unidos.

Sin decírselo a sus padres, Mario partió junto a la caravana desde su localidad en Honduras y el viernes quedó en medio de los disturbios que se desataron en un puente en la frontera entre Guatemala y México.

Mario fue de los primeros que intentó cruzar el puente. Quiso tirarse al río y sufrió con los gases lacrimógenos que lanzó la policía mexicana.

“En Honduras uno sufre”, le dijo Mario a BBC Mundo, que le hizo una entrevista en medio de su travesía por México. Según cuenta, en Honduras no iba a la escuela. En cambio, algunas veces vendía chicles en las calles para llevar algo de dinero a casa. “Me querían meter a una pandilla”, aseguró. “Me decían que me metiera, que me iban a pagar bien, pero yo no quería”.

Las condiciones de la familia son muy difíciles. El padre de Mario trabaja como vigilante y la madre no trabaja.

Dilsia recuerda que en algunas ocasiones Mario ya le había dicho que quería irse a Estados Unidos porque allá se podía “hacer un billetal” (fortuna). La semana pasada, Mario le dijo a ella y a su padre que iba para el centro y regresaría en la tarde. Pero las horas pasaron y Mario no regresó. “Unas amigas me avisaron, me llamaron por teléfono y me dijeron que lo habían visto por la tele en la caravana”.

El niño declara que seguirá en su empeño por llegar a Estados Unidos mientras la madre reza para que llegue sano y salvo.

“Caminar es muy duro pero mi misión es llegar”, dice Mario. “Extraño mi casa pero hay que seguir adelante”, añadió.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad