Las negociaciones se retomarán el próximo viernes 11 en Caracas.
Centenares de estudiantes venezolanos marcharon ayer en forma pacífica y sin el apoyo de la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) por las calles de Caracas para pedir al Vaticano, principal mediador en el proceso de diálogo, que exija al presidente Nicolás Maduro respeto a los derechos humanos.
Bajo la consigna "no soy la MUD, no soy Maduro, soy estudiante que defiende su futuro", los jóvenes que no forman parte de la mesa de conversaciones, partieron acompañados por dirigentes de los partidos Voluntad Popular, Primero Justicia y Vente Venezuela.
En tanto centenares de chavistas se concentraron en diversos puntos de la capital para expresar su apoyo a Maduro.
Los estudiantes caminaron en forma pacífica desde la avenida Libertador hasta la sede de la Nunciatura Apostólica. Ahí entregaron un documento a Aldo Giordano, Nuncio Apostólico, en el que exigen la liberación de todos los presos políticos, un cronograma de elecciones generales, cese a la persecución contra líderes opositores y estudiantes y mejora en el acceso a alimentos y medicinas.
"Las exigencias las vamos a mantener con o sin diálogo, además nos vamos a mantener en las calles de manera pacífica y no vamos a caer en chantajes", aseveró Hasler Iglesias, presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela.
A su vez Giordano tras recibir el texto expresó a los jóvenes la importancia de que los sectores políticos del país bajen al tono de su lenguaje. "Que Dios bendiga sus deseos de un país con justicia y paz", acotó.
En tanto. la exparlamentaria María Corina Machado, dijo a ANSA, que no habrá cambios políticos en el país sin la presión popular en la calle. "No es momento de retroceder sino de avanzar", indicó en medio de la marcha.
En tanto, cientos de seguidores del chavismo se manifestaron en el centro de Caracas en apoyo al presidente Maduro.
Además, la Juventud del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (JPSUV) instaló un campamento a las afueras del Palacio de Miraflores, sede del Gobierno.
El vicepresidente del PSUV, el diputado Diosdado Cabello, considerado el número dos del chavismo, denunció que el partido opositor Voluntad Popular planea acciones violentas en los campamentos del chavismo. Cabello afirmó que a través de una supuesta "Operación Troya" los opositores van a tratar de infiltrarse al "meter a unos hombres de camisa roja al Palacio de Miraflores".
RESPETO A LOS DERECHOS HUMANOS