El presidente venezolano, Nicolás Maduro, se iba a reunir con el papa Francisco en el Vaticano mañana domingo, pero su médico le prohibió viajar en avión. Sufre de una "otitis fuerte".

El presidente venezolano Nicolás Maduro anunció este sábado la suspensión "por una otitis fuerte" de su viaje a Roma y el Vaticano, en el que debía recibir un reconocimiento de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y entrevistarse con el papa Francisco.

"He tenido que suspender el viaje a Roma (...) Por una otitis fuerte, los médicos me han prohibido montarme a un avión. Me han obligado a descansar", dijo el mandatario en una breve intervención televisiva.

Maduro recordó que durante ese viaje debía recibir un reconocimiento de la FAO a Venezuela por sus esfuerzos en la lucha contra la pobreza y el hambre, por sus varios programas sociales de distribución de alimentos subsidiados.

El vicepresidente Jorge Arreaza tomará el lugar de Maduro en la reunión de la FAO.

Además "iba a una entrevista personal con el papa Francisco" en el Vaticano el domingo, recordó Maduro, quien aseguró que ambas partes buscarán "una nueva fecha para el encuentro".

Los opositores a Maduro llevan varios días pidiéndole al papa Francisco su ayuda para resolver la crisis política y social en Venezuela y para liberar a varios opositores presos, entre ellos los dirigentes de la formación radical Voluntad Popular (VP) Leopoldo López y Daniel Ceballos, ambos en huelga de hambre desde hace días.

Este sábado, en un acto encabezado por las esposas de ambos, centenares de opositores se concentraron en una iglesia del oeste de Caracas en una vigilia, que iba a continuar hasta que se conociera el resultado de la entrevista entre Maduro y el papa Francisco.

venezuelaAFP