VENEZUELA

El régimen presiona para que vayan a votar ante la apatía de la población; interviene a banco Banesco.

El régimen de Nicolás Maduro puso a prueba ayer domingo la maquinaria del chavismo a fin de que no se le escape nada durante los cuestionados comicios del 20 de mayo.

"Ha salido muy bien. Los reportes son muy positivos", celebró Maduro en rueda de prensa tras participar en el simulacro electoral en la escuela Simón Rodríguez, ubicada en el principal complejo militar de Caracas, Fuerte Tiuna.

El Consejo Nacional Electoral (CNE), organismo que responde al régimen, convocó al simulacro a fin de "brindar" a los electores "contacto y familiarización con el sistema de votación", según un mensaje que difundió en redes sociales.

Maduro, quien busca la reelección, había llamado a sus partidarios a acudir masivamente. "Claro que tenemos la fuerza para ganar y vamos a ganar, pero tenemos que afinar nuestra maquinaria para garantizar los votos", pidió el viernes durante un mitin.

Habrá 14.500 centros de votación el día de las elecciones, a las que están citados 20.5 millones de los 30 millones de venezolanos.

Las Unidades de Batalla Bolívar-Chávez (UBCH), organizaciones comunales encargadas de movilizar votantes del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), son los ejes de la maquinaria oficialista, manejando en sus áreas de influencia listados de personas para ser trasladadas a los centros de votación.

El principal rival del mandatario en las elecciones es Henri Falcón, quien se postuló rompiendo un boicot de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

La MUD se negó a presentar candidatos y llama a la abstención en unas elecciones que denuncia como un "show fraudulento". Los comicios, además, son desconocidos por Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de América Latina.

Pese a los cuestionamientos, Maduro vaticina una participación que batirá "récords" y trazó como meta ganar con 10 millones de votos.

El régimen promete "premiar" a las personas que voten y posean el Carnet de la Patria, documento necesario para acceder a planes sociales que es calificado por la oposición como un "mecanismo de control social".

"Hago un llamado a todos los carnetizados [...], vamos a votar el 20 de mayo. Esto es dando y dando", insistió Maduro este domingo en un mensaje vía Facebook Live, rodeado por altos funcionarios gubernamentales y dirigentes del PSUV.

Mientras se aproxima el día de las elecciones, Maduro sigue adoptando medidas para controlar todos los hilos de la economía en Venezuela, hundida en una crisis histórica con escasez de alimentos y medicamentos, en medio de una emigración masiva principalmente a países vecinos.

Ayer domingo Maduro dijo que los primeros días de intervención de Banesco —la mayor entidad financiera privada del país— han arrojado un balance positivo.

"Me tocó tomar una decisión necesaria de intervenir el banco Banesco, una intervención de puertas abiertas. Es muy positivo el resultado y la reacción del público el primer día, y va a seguir siendo así", dijo el mandatario durante una rueda de prensa en Caracas.

El banco fue intervenido el jueves pasado por un lapso de 90 días.

Maduro acusó a este banco de estar haciendo "un ataque al pueblo venezolano terrible, horrible". Dijo además que la intervención se enmarca en la operación "Manos de Papel" que el régimen lanzó el mes pasado para combatir supuestas "mafias económicas" que incurren en el contrabando de dinero físico y "suben" el precio de otras divisas en los mercados paralelos.

Consideró que este plan "apenas ha empezado y va bien" pues han detenido a más de 250 personas y han congelado más de mil cuentas bancarias relacionadas con esta trama delictiva.