MARCHA DE LA PANDEMIA 

El presidente francés, Emmanuel Macron, recurrió a las redes sociales Tik Tok e Instagram para tratar de contrarrestar la desinformación sobre las vacunas contra el COVID-19 tras un tercer fin de semana de manifestaciones por un polémico certificado sanitario.

Macron trocó su habitual traje oscuro y corbata por una camiseta negra en un breve vídeo desde la residencia de verano de la presidencia en el sur de Francia, en el que afirmó que las vacunas eran la "única arma" frente a una cuarta ola de infecciones de COVID. 

"Algunos de ustedes han escuchado rumores falsos, algunos de ellos son basura, hay que decirlo", dijo en el video selfie, en el que instó a los reacios a las vacunas a plantearle directamente sus preguntas y preocupaciones.

Macron tomó la palabra después de una tercera jornada de protestas callejeras por el nuevo certificado sanitario que sacó a la calle a unas 200.000 personas en toda Francia el sábado.

Los manifestantes protestan desde que Macron anunció el mes pasado que se pediría a los ciudadanos una prueba de vacunación, un resultado negativo en la prueba de COVID o una recuperación reciente del virus para poder entrar en la mayoría de los museos, cines y recintos deportivos del país.

La norma, que pretende frenar una cuarta ola de contagios, se extenderá a bares, restaurantes, trenes de largo recorrido y centros comerciales el 9 de agosto.

El sábado por la noche, un centro de vacunación en la isla caribeña francesa de Martinica fue incendiado por manifestantes, mientras que en la ciudad de Montpellier, en el sur de Francia, manifestantes acorralaron a un farmacéutico que realizaba pruebas de coronavirus, acusándolo de "asesino" y "traidor".

Hasta ahora, 42,6 millones de personas en Francia han recibido al menos una dosis de la vacuna, lo que representa el 63,2% de la población. De ellos, 35,7 millones están totalmente vacunados, lo que supone el 52,6% de los franceses.

Casi 112.000 personas han muerto en Francia desde el inicio de la pandemia.