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Macron inicia mandato y va por obtener la mayoría

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Emmanuel Macron. Foto: AFP
French newly elected president Emmanuel Macron (C) waves as he leaves after an information day for La Republique En Marche party candidates for the upcoming legislative elections at the entrance of the Quai Branly museum on May 13, 2017 in Paris. The two-round parliamentary elections wil take place in France on June 11 and June 18. / AFP / CHARLY TRIBALLEAU FRANCE2017-VOTE-LEGISLATIVE-EMA
CHARLY TRIBALLEAU/AFP

Comienza con tres reformas de fondo y en un mes tiene que ganar elección legislativa.

Emmanuel Macron, de 39 años, que logró amplio triunfo en las elecciones realizadas el 7 de mayo, asumirá hoy domingo la presidencia de Francia, y comenzará un mandato que despierta expectativa mundial ante el desafío que representa para un político sin experiencia lidiar con los profundos problemas económicos, sociales y de seguridad.

Macron —un ex ministro de Economía en el gobierno de François Hollande, que nunca antes había ocupado un cargo de elección popular—, derrotó a la candidata de la extrema derecha, Marine Le Pen con 66,04% de los votos contra 33,96%, y ha prometido poner fin a la división política tradicional de izquierda y derecha que, dice, ha permitido que intereses creados bloqueen las reformas económicas.

Regenerar la política francesa, mancillada en los últimos meses por los escándalos de corrupción, y reformar el mercado laboral para relanzar el empleo, principal preocupación de los franceses, son las primeras tareas que ha prometido abordar. Ha anunciado un plan de medidas de choque nada más llegar al Elíseo, que aprobará en muchos casos por decreto, lo que le permitirá acortar los trámites parlamentarios.

Las elecciones legislativas fijadas para el 11 y 18 de junio, que renovarán la Asamblea Nacional, indicarán el poder real con el que contará Macron, que en caso de no tener una mayoría suficiente, deberá negociar con otros partidos.

Al asumir hoy y convertirse en el presidente más joven de la historia de Francia, enfrentará el desafío de las elecciones parlamentarias, porque del apoyo y por consiguiente del número de bancas que obtenga su partido La República en Marcha, dependerán sus posibilidades de implementar los planes de reducción del gasto público y de reforma de los sistemas tributario, laboral y de jubilaciones.

Después de que los dos partidos principales —Los Republicanos, de centroderecha y el Partido Socialista— no lograron llegar al balotaje, sus perspectivas de conseguir una mayoría que le permita llevar a cabo sus promesas electorales dependerán de que el mandatario pueda ampliar su base de centro.

Como dijo Macron a Efe en una reciente entrevista, "el primer texto que será presentado abordará la moralización y la renovación de nuestra vida política", ante los casos de corrupción. Eso le sirvió para contrarrestar a dos de sus rivales, François Fillon y Marine Le Pen, investigados ambos por presuntos casos de malversación de fondos a través de empleos ficticios de asistentes parlamentarios.

Pero, el punto más delicado al que hará frente Macron es la reforma laboral. Ha dicho que la que aprobó su antecesor "va en la buena dirección, pero es insuficiente", lo que hace presagiar un texto que no gustará a los sindicatos más combativos. Se estima que las centrales sindicales no darán tregua a la reforma que impulsará el nuevo presidente.

Presupuesto.

Su objetivo principal es permitir que las condiciones laborales, en particular la jornada de trabajo, sea negociada en cada empresa o a nivel sectorial para las pequeñas y medianas empresas, dejando así de lado los convenios colectivos, una idea que los sindicatos consideran pone en manos de los empresarios todo el poder.

Macron ha prometido —con la finalidad de contrarrestar ese efecto— un enorme impulso a la formación profesional de los desocupados y de los jóvenes (su plan prevé 15.000 millones de euros) y un refuerzo del seguro de desempleo, que será extendido también a los autonónomos. A cambio, ha asegurado que retirará ese seguro a quien rechace más de dos ofertas de "empleo decente".

A favor de Macron jugará el hecho de que los sindicatos más combativos han perdido fuerza. La CGT ha perdido su posición de principal central obrera del país en beneficio de la CFDT, más favorable a negociar reformas con el gobierno y que ya aceptó la de Hollande.

Macron tiene previsto que la nueva Asamblea Nacional surgida de las legislativas de junio se ponga a trabajar ya en julio para aprobar los nuevos presupuestos, y para que en septiembre tenga lista una nueva trayectoria presupuestal para los siguientes cinco años. En el punto de mira está aplicar recortes presupuestales por 60.000 millones de euros.

Otra medida, destinada a mejorar el poder adquisitivo de la población, será eliminar el impuesto municipal de residencia, que actualmente se paga por todas las viviendas ocupadas y que quiere suprimir para el 80% de la población con ingresos menores.

Primer diálogo es con Merkel.

La canciller de Alemania, Angela Merkel , recibirá mañana lunes en Berlín a Emmanuel Macron, 24 horas después de que éste asuma la presidencia de Francia, informó el gobierno alemán. Francia es la quinta economía del mundo y motor de la Unión Europea junto con Alemania. Merkel expresó su confianza de que con Macron se mantendrá la fortaleza y solidez del eje franco-alemán, aunque avanzó que no ve motivos para cambiar el Pacto Europeo de Estabilidad y Crecimiento. Macron ha anunciado que aguardarda el resultado de las elecciones en Alemania para relanzar el proyecto europeo de forma conjunta. Fuente: EFE

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Emmanuel Macron. Foto: AFP

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