ELECCIONES PRESIDENCIALES

Con el 25,36% de mesas escrutadas, el opositor Laurentino “Nito” Cortizo conseguía el 33,66% de los votos, seguido del también opositor Rómulo Roux con el 30,80%, en una cerrada lucha por la Presidencia en los comicios generales de ayer domingo en Panamá.

En el tercer lugar se ubicaba Ricardo Lombana (19,64%), en lo que se traduce como un ascenso histórico del movimiento independiente en Panamá, y en el cuarto con el 10,16% el candidato oficialista José Blandón.

Casi todas las encuestas vaticinaron que la Presidencia de Panamá la disputarían Cortizo, del histórico Partido Revolucionario Democrático (PRD) de centroizquierda, y Roux, de Cambio Democrático (CD) de centroderecha, aunque daban al primero un margen de al menos 10 puntos por encima. Solo un sondeo colocó a Roux a la cabeza con dos puntos más.

El ente rector de los comicios denomina a estos resultados “extraoficiales” porque los “oficiales” los dará la Junta Nacional de Escrutinio (JNE), que tiene hasta cuatro días para escrutar los votos.

La Junta Nacional de Escrutinio es una corporación electoral autónoma independiente del Tribunal Electoral que se instala con cada elección, y su función es escrutar los votos para presidente y proclamar al ganador.

Más de 2,7 millones de electores estaban llamados a las urnas para elegir al presidente y vicepresidente, diputados a la Asamblea Nacional y al Parlamento Centroamericano (Parlacen), alcaldes, representantes de corregimiento y concejales.

Cortizo (66), ministro de Agricultura durante el gobierno de Martín Torrijos (2004-2009), ha cautivado a los panameños con sus promesas de limpiar la imagen del país tras los recientes escándalos de corrupción y de cerrar las brechas socioeconómicas en una de las naciones con mayor crecimiento económico. Poco antes de emitir su voto, Cortizo dijo que temía por la reputación de Panamá como un importante centro financiero tras el inminente veredicto del Grupo de Acción Financiera (GAFI), un ente intergubernamental creado para establecer los estándares de lucha contra el financiamiento ilícito.

Panamá ha aparecido en la lista de países con deficiencias en sus medidas para enfrentar el lavado de dinero.