PANDEMIA

Un estudio en Brasil del Grupo Acción Covid-19 muestra que, con el nivel actual de contagios, los estados brasileños deben vacunar entre el 22% y el 83% de la población para que disminuya la tasa de reproducción de la enfermedad.

Hasta el momento, el estado con la tasa de vacunación más alta ha ido Mato Grosso do Sul: 3,3% de las personas inmunizadas con ambas dosis.

Tocantins es el estado donde más personas (83%) necesitan vacunarse para cambiar el curso de la pandemia. Esto se debe a que es el lugar con la progresión de casos más descontrolada.

Cuando se realizó el estudio, entre el 22 de febrero y el 22 de marzo, la tasa de reproducción fue de 1,72. Esto significa que 100 personas infectadas transmitieron la enfermedad a otras 172.

“Las medidas de aislamiento social son efectivas para disminuir la tasa de transmisión, porque disminuye el número de personas que necesitan ser vacunadas para que la pandemia esté bajo control. Es decir, para que el número de nuevos casos caiga diariamente”, dijo Beatriz Carniel, doctora en Medicina Tropical y miembro de Acción Covid-19.

Del 83% de los habitantes que necesitan ser vacunados en Tocantins, solo el 2,16% ya está inmunizado. San Pablo, a su vez, necesitaría el 46,98% de la población vacunada, pero de ese total, solo aplicó dosis en el 5,62%.

Los autores del estudio argumentan que la distribución de dosis debe realizarse según el criterio de urgencia, y no proporcionalmente a la población de riesgo, como se hace actualmente.

Según Carniel, se trata de una cuestión de equidad. “Lo que aparece en este estudio es la necesidad de una distribución diferente de las vacunas, de estado a estado, en cada momento de la pandemia”, dice esta experta. Y concluye: “Considerando la escasez de vacunas, sería necesario priorizar estados con mayor necesidad de controlar la transmisión del virus”.

Río de Janeiro y Maranhão son los estados donde, ahora, menos personas (22%) necesitan vacunarse para llegar al punto donde la pandemia está bajo control.

Esto no significa que las personas no necesiten vacunarse después de este nivel, explican los investigadores, ni que la vida vuelva a la normalidad. Esto solo puede suceder cuando los estados alcancen la inmunidad colectiva, lo que, en teoría, significa al menos el 70% de la población inmunizada.