Publicidad

Isla Jersey, un “campo de batalla” del Brexit

Compartir esta noticia
Isla Jersey: sus autoridades locales limitaron el acceso de los pescadores franceses, lo que motivó la protesta de ayer jueves. Foto: AFP
ALTERNATIVE CROP - French fishing boats protest in front of the port of Saint Helier off the British island of Jersey to draw attention to what they see as unfair restrictions on their ability to fish in UK waters after Brexit, on May 6, 2021. - Around 50 French fishing boats gathered to protest at the main port of the UK island of Jersey on May 6, 2021, amid fresh tensions between France and Britain over fishing. The boats massed in front of the port of Saint Helier to draw attention to what they see as unfair restrictions on their ability to fish in UK waters after Brexit, an AFP photographer at the scene said. (Photo by Sameer Al-DOUMY / AFP) / ALTERNATIVE CROP
SAMEER AL-DOUMY/AFP

TENSIÓN

Frente al puerto de la isla de Jersey -la mayor del Canal de la Mancha- un grupo de medio centenar de embarcaciones de pescadores franceses se concentró para protestar por las limitaciones a la pesca.

En el Canal de la Mancha hay una isla británica que se hizo famosa por la novela La Sociedad Literaria del Pastel de Piel de Patata de Guernsey, única y póstuma obra de la editora estadounidense Mary Ann Shaffer, que su sobrina, la escritora Annie Barrows, le ayudó a terminar. Muy cerca de Guernsey está la isla de Jersey, que ayer jueves se convirtió en un “campo de batalla” entre el Reino Unido y Francia por cabos sueldos que dejó la salida británica de la Unión Europea.

Frente al puerto de la isla de Jersey -la mayor del Canal de la Mancha- un grupo de medio centenar de embarcaciones de pescadores franceses se concentró para protestar por las limitaciones a la pesca.

La tensión fue tal que el gobierno británica envió a la zona dos navíos de guerra, los patrulleros HMS Severn y Tamar.

Poco después los barcos pesqueros se retiraron, pero el conflicto entre los gobiernos británico y francés está lejos de terminar.

“Dado que la situación está resuelta por ahora, las patrulleras de la Marina Real se prepararán para regresar a puerto en el Reino Unido”, señaló un portavoz británico, que recalcó que Londres permanece alerta “para ofrecer cualquier otra ayuda necesaria si Jersey lo demanda”.

Francia también había enviado a la zona, en aguas francesas, dos patrulleros para garantizar “la seguridad de la navegación y la salvaguarda de la vida humana en el mar”, según las autoridades galas.

El origen de este conflicto está en el pacto de salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).

Por ejemplo, el Gobierno británico esgrime que el Acuerdo de Comercio y Cooperación que regula las relaciones entre los bloques tras el Brexit “trajo cambios a los arreglos pesqueros entre el Reino Unido y la Unión Europea”.

Las autoridades de Jersey, una dependencia de la Corona británica con gobierno autónomo, “tienen derecho a regular la pesca en sus aguas bajo este acuerdo y nosotros les respaldamos en el ejercicio de esos derechos”, afirmó el portavoz del gobierno del primer ministro Boris Johnson.

Este conflicto en particular con los pescadores franceses se inició ante la decisión de las autoridades de Jersey de imponer limitaciones a la flota gala sobre cuántos días al año pueden faenar, qué especies pueden capturar y las artes de pesca que pueden utilizar.

Dimitri Rogoff, presidente del comité de pesca de Normandía, dijo que “la demostración de fuerza ha terminado, ahora es la política la que tiene que recoger el guante”.

Según Francia, las condiciones para pescar en la zona de la isla de Jersey “no fueron concertadas, discutidas ni notificadas previamente”, como parte del acuerdo del Brexit en vigor desde el 1° de enero de 2021.

Reino Unido publicó ayer una lista de 41 barcos franceses, de 344 solicitudes, autorizados a pescar en aguas de Jersey, pero la lista viene con nuevos requisitos “que no fueron acordados, discutidos o notificados de antemano” en el acuerdo del Brexit, dice Francia.

La ministra francesa del Mar, Annick Girardin, dijo el martes que Francia estaba dispuesta a recurrir a “medidas de represalia” si las autoridades británicas seguían restringiendo el acceso de los pescadores franceses a las aguas de Jersey, aludiendo a posibles repercusiones en la “transmisión de electricidad por cable submarino” que abastece a la isla desde Francia.

“Espero que las autoridades británicas reconsideren su decisión” de imponer nuevas restricciones de acceso a las licencias de pesca concedidas a los pescadores franceses, declaró Girardin.

Libro polémico.

Esta tensión en torno a Jersey por los permisos de pesca en el Canal de la Mancha, coincide con el lanzamiento de un libro del negociador europeo para el Brexit, el francés Michel Barnier.

En el libro La gran ilusión. Diario secreto del Brexit, Barnier ofrece sus impresiones y reflexiones casi diarias del proceso de salida del Reino Unido de la UE. Sus páginas están salpicadas con críticas a distintos responsables británicos.

Para Barnier, los partidarios del Brexit “subestimaron” desde el principio “la complejidad legal de este divorcio y muchas de sus consecuencias”.

Brexit. Foto: Pixabay
Foto: Pixabay

Tras la sorpresiva victoria del Sí en el referéndum del 23 de junio de 2016 que costó el puesto al primer ministro David Cameron, su sucesora Theresa May presentó sus prioridades para la negociación del Brexit en el llamado Discurso de Lancaster, en enero de 2017.

Barnier muestra entonces su “asombro” por cómo May desvela en ese discurso todas sus líneas rojas y sus cartas negociadoras, cerrándose muchas puertas, “antes de que hayamos empezado a negociar”.

A pesar de ello, reconoce que la entonces primera ministra -obligada a dimitir después de que el Parlamento votara contra sus propuestas- es “una mujer valiente y tenaz”, aunque “bastante rígida”.

En cambio, considera que May estuvo “rodeada de hombres que ponen sus intereses personales por delante de los de su país”.

Igual de ácido es con otras figuras del partido Conservador, como el actual primer ministro Boris Johnson, al que califica de “barroco”, o al exsecretario de Estado Dominic Raab, definido como “casi mesiánico”.

La publicación del libro abre otro frente, en este caso a nivel interno, ya que marca el retorno de Barnier a la política doméstica francesa.

Barnier, exministro en los gobiernos de Jacques Chirac y Nicolas Sarkozy, no descarta a sus 70 años postularse a las presidenciales de 2022.

Al final de las 530 páginas de su libro, Barnier dejó deslizar sus prioridades de cara al futuro: “Juntos, vamos a sentar las bases de una nueva prosperidad (...) Nuestro trabajo comienza por Francia”, escribió. (Con información de AFP y EFE)

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Brexit

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad