En los doce meses del 2014, la totalidad de fallecidos fue de 3.279. La Organización Internacional para las Migraciones considera inaceptable que en pleno siglo XXI las personas deban pasar estos terribles sucesos.

Más de 2.000 inmigrantes murieron en lo que va del año en el mar Mediterráneo mientras buscaban alcanzar las costas europeas, denunció la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

En el mismo período del 2014 fallecieron 1.607 personas. En todo el 2014 las víctimas fueron 3.279 personas.  Como en el 2014, la mayor parte de los migrantes murió mientras trataba de atravesar el canal de Sicilia, a lo largo de la ruta del Mediterráneo central que une Libia con Italia.

Según las estadísticas, subrayó la OIM en un comunicado, la ruta del Mediterráneo central es la más peligrosa respecto a las otras: este año Italia y Grecia registraron un flujo semejante de migrantes (respectivamente 97.000 y 90.500), pero 1.930 personas murieron mientras intentaban alcanzar Italia contra las 60 fallecidas en ruta hacia Grecia.

Los traficantes de seres humanos en el tramo que une Libia con Italia y que cruzan el canal de Sicilia, utilizan un tipo de embarcaciones que hacen aumentar las probabilidades de tragedias, escribió la OIM.

"Es inaceptable que en el siglo XXI la gente que escapa de los conflictos, de las persecuciones, de la miseria y de la degradación de la tierras tenga que soportar estas terribles experiencias en sus países, para no hablar durante el viaje, para morir luego a las puertas de Europa", comentó el director general de la OIM, William Lacy Swing.

Unos 188.000 migrantes fueron salvados en el Mediterráneo desde comienzos de este año, prosiguió la OIM, según la cual otros migrantes tratarán de llegar a las playas de Europa en el curso del verano (boreal) y la cifra de 200.000 será alcanzada muy pronto.

No obstante estas tragedias, la OIM reconoció los "esfuerzos extraordinarios de las fuerzas navales en el Mediterráneo, que siguen salvando vidas humanas cada día". Son unos 188 mil los salvados hasta ahora en esas aguas, y según la organización, muy pronto superarán las 200 mil llegadas.

El pasado fin de semana se contaron 19 víctimas en el canal de Sicilia: los migrantes murieron por el cansancio y la sed: según testimonios de los sobrevivientes, el agua a bordo fue utilizada para enfriar los motores de la embarcación.

En abril pasado se hundió una embarcación con unas 700 personas en el canal de Sicilia. Fueron recuperados 24 cadáveres y hubo 28 sobrevivientes, en la mayor tragedia de este tipo ocurrida en el Mediterráneo en las dos últimas décadas.

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