Publicidad

Guillermo Lasso, el presidente que llega para dejar atrás al “correísmo” en Ecuador

Compartir esta noticia
El presidente electo Guillermo Lasso junto a su familia frente a la tumba de sus padres ayer lunes en un cementerio de Guayaquil. Foto: AFP
Handout picture released by Guillermo Lasso's press office showing Ecuadorean president-elect Guillermo Lasso visiting his parents' grave along with other relatives at a cemetery in Guayaquil, on April 12, 2021. - Former banker Guillermo Lasso pledged to change crisis-wracked Ecuador's "destiny" after overcoming leftist economist Andres Arauz -who conceded late on Sunday night- in the country's presidential election with 96.35 percent of votes counted. . (Photo by Handout / GUILLERMO LASSO PRESS OFFICE / AFP) / RESTRICTED TO EDITORIAL USE - MANDATORY CREDIT "AFP PHOTO / GUILLERMO LASSO PRESS OFFICE " - NO MARKETING - NO ADVERTISING CAMPAIGNS - DISTRIBUTED AS A SERVICE TO CLIENTS
HANDOUT/AFP

PERFIL

Lasso, de 65 años, consiguió llegar a la Presidencia en su tercer intento, tras imponerse el domingo por apenas cinco puntos al correísta Andrés Arauz.

Unidad y diálogo. Estas dos palabras resumen el norte que Guillermo Lasso, el presidente electo de Ecuador, quiere darle a su gestión. La tarea no se le presenta fácil, luego de años de fuerte división política y con el principal líder de la oposición, Rafael Correa, radicado en el exterior por las causas judiciales que tiene abiertas en su país.

Lasso, de 65 años, consiguió llegar a la Presidencia en su tercer intento, tras imponerse el domingo por apenas cinco puntos al correísta Andrés Arauz. Sus dos derrotas fueron en 2013 y 2017.

“Los ecuatorianos han optado por un nuevo rumbo, muy diferente al de los últimos catorce años en Ecuador”, manifestó Lasso desde el palacio de convenciones en Guayaquil, al declararse vencedor de las elecciones.

Líder del movimiento centroderechista Creando Oportunidades (CREO), que fundó en 2012, Laso sostiene que los esquemas de izquierda y derecha “han perdido vigencia globalmente”.

Lasso había pasado a la segunda vuelta tras obtener el 19,74% de los votos en los comicios del 7 de febrero, en los que Arauz logró aventajarle por más de 12 puntos, lo que en principio lo posicionaba en desventaja.

La tercera es la vencida.

Nacido en Guayaquil en el seno de una familia de clase media, Lasso es un ex banquero que trabajó para pagar sus estudios. Y aunque no concluyó la universidad, realizó un diplomado en Administración de Empresas en el Instituto de Desarrollo Empresarial y, en 2011, la Universidad de las Américas de Ecuador le concedió el título de Doctor Honoris Causa.

De hablar sereno, es amigo personal del ex presidente español José María Aznar y del escritor Mario Vargas Llosa, y acumula una experiencia de medio siglo tanto en el sector privado como en el público.

En 1989 fue presidente ejecutivo de Banco Guayaquil, donde fundó en 2008 el Banco del Barrio, reconocido por el BID como el mayor proyecto de Bancarización de América Latina.

Guillermo Lasso este domingo de noche. Foto: AFP
Guillermo Lasso este domingo de noche. Foto: AFP

En 2012 renunció a la dirección del Banco Guayaquil, del que sigue siendo uno de sus principales accionistas, para dedicarse a la política, aunque su pasado como banquero ha sido siempre arma de doble filo en manos de sus detractores.

Sus adversarios le recuerdan que en 1999 fue “superministro” de Economía de Jamil Mahuad, quien instauró la dolarización tras la peor crisis financiera del país, y que tuvo consecuencias devastadoras a nivel económico, político y social.

Pero él suele aclarar que, por diferencias con Mahuad, ocupó el cargo solo un mes y que el Banco de Guayaquil fue responsable con sus clientes y no sucumbió a la crisis.

En su paso por la vida pública, Lasso fue también gobernador de la provincia de Guayas entre 1998 y 1999.

Con la fundación del movimiento CREO, en 2012, Lasso inició su andadura hacia el palacio de Carondelet, sede del Ejecutivo ecuatoriano, pero en los comicios de 2013 perdió ante Correa, que arrasó en primera vuelta.

En la segunda vuelta de 2017, en medio de denuncias de fraude, perdió por 2,3 puntos porcentuales ante Lenín Moreno, que se presentaba como heredero de Correa pero con el que poco después se enemistó.

“Durante más de diez años me he preparado para ser presidente del Ecuador. Empecé viajando por todo el país, conversando con la gente, conociendo sus problemas, sus necesidades. Luego impulsé un tanque de pensamiento, ‘Ecuador Libre’, para estudiar soluciones a esos problemas sociales”, aseguró Lasso.

Ecuador arrastra una deuda de casi 70.000 millones de dólares que dificultarán la labor del próximo presidente, y las consecuencias de la pandemia incluyen alto desempleo, pobreza y un alicaído sector privado.

Lenin Moreno. Foto: EFE
Lenin Moreno. Foto: EFE

Por ello, apeló a su experiencia profesional y ofreció dejar atrás el llamado “Socialismo del Siglo XXI” con el que se identifican Correa y Arauz.

Lasso también enfrentará la oposición de Yaku Pérez, un líder indígena que estuvo a punto de llegar a la segunda vuelta presidencial con una plataforma ambiental, que incluía una propuesta para prohibir la minería industrial.

“Quiero ser presidente para profundizar un cambio que nos permita mirar al mundo sin miedos ni complejos, porque allí está nuestra oportunidad para crecer”, aseguró Lasso en la campaña.

Arduo defensor de la economía de mercado, casa adentro quiere gobernar con un aparato estatal optimizado y dinamizar el sector privado, mientras en su política exterior aboga por una apertura sin sesgos ideológicos y una relación especial con Estados Unidos, principal socio comercial de su país.

Último de once hermanos, Lasso está casado, tiene cinco hijos y siete nietos.

Católico -pertenece al Opus Dei-, se opone al aborto y, aunque dice respetar las uniones entre personas del mismo sexo, no las considera un “matrimonio”.

“Trabajaremos juntos desde ya por el verdadero cambio”, escribió Lasso ayer lunes en su cuenta de Twitter. “Hoy amanecemos en paz y con la certeza de que vienen mejores días para todos”.

Lasso asumirá el cargo el 24 de mayo por un periodo de cuatro años.

“El reto de Lasso es generar esa unidad nacional que tanto le sirvió como excelente mensaje en su segunda vuelta”, cuando propició el “reencuentro”, dice el politólogo César Ulloa.

Investigador de la Universidad de las Américas, Ulloa cree que el correísmo perdió por “recurrir a la misma estrategia que le fue válida en los catorce años: la polarización”. Y considera que el de Lasso es un triunfo “importante” porque es la primera vez desde 2007 que el correísmo pierde las elecciones presidenciales, pues también Moreno llegó al poder en 2017 con el apoyo del exmandatario, de quien luego se distanció.

Obtener el apoyo del Parlamento será otro desafío para Lasso. Su partido CREO apenas cuenta con 14 de las 137 bancas, más 17 de su aliado Partido Social Cristiano. (EFE, AFP, Reuters)

Perú entre un sindicalista y la hija de Fujimori

El socialista Pedro Castillo, que había pasado casi desapercibido antes de las elecciones del domingo en Perú, definiría la presidencia en un balotaje con la derechista Keiko Fujimori, que pasó al segundo lugar en los conteos de casi el 80% de actas electorales.

Castillo -un dirigente sindical de 51 años- obtenía el 18,20% de los votos, seguido de Fujimori -la hija del encarcelado exmandatario Alberto Fujimori- con el 13,17%, con una tendencia al alza frente al liberal Hernando de Soto, que tenía un 12,35%. Castillo emergió en los primeros lugares en los sondeos en la recta final de la campaña electoral, con un discurso radical de izquierda.

Por su parte Fujimori, que intentará por tercera vez llegar al poder a través de una segunda ronda electoral, enfrenta una investigación por presunto lavado de dinero, por la que los fiscales piden 30 años de prisión. Entre las promesas de Castillo destacan la redacción de una nueva Constitución para darle al Estado un rol más importante en la economía.

Castillo ha prometido acabar con la corrupción, reducir el sueldo de los funcionarios públicos y renegociar contratos con las empresas extractivas de cobre.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad