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Ganó el PSOE pero deberá pactar para gobernar; desplome del PP

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En una alocución desde la sede del PSOE, en Madrid, el presidente socialista Pedro Sánchez tendió su mano “a todos los grupos para gobernar dentro de la Constitución”. Foto: Reuters.

ESPAÑA

La ultraderechista Vox entró al Parlamento; Ciudadanos crece y se planta como oposición.

Claro triunfo del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), aunque deberá acordar con otros bloques afines para seguir gobernando; desplome electoral del Partido Popular (PP), que pese a mantenerse como la segunda fuerza perdió más de la mitad de su bancada de diputados; el ingreso de la ultraderechista Vox al Parlamento nacional. Tales las tres principales conclusiones que dejaron las elecciones legislativas de ayer domingo en España. Pero las tres pueden resumirse en una: España seguirá tan fragmentada como antes de estas elecciones.

El PSOE del presidente Pedro Sánchez logró 123 diputados, en un Congreso de 350 escaños, tras conseguir un 28,7% de los votos, lo que supone una fuerte subida sobre los 84 legisladores que tenía hasta ahora. Además, los socialistas se han asegurado la mayoría absoluta en el Senado. Se trata de la primera victoria nacional del PSOE desde las elecciones de 2008, bajo el liderazgo de José Luis Rodríguez Zapatero.

“Los españoles quieren claramente que el Partido Socialista Obrero Español gobierne y lidere el país durante los próximos cuatro años”, dijo un eufórico Sánchez ante miles de seguidores agolpados en la calle ante la sede de su partido en Madrid. Sánchez tendió la mano “a todos los grupos para gobernar dentro de la Constitución”, en lo que pareció una advertencia a los independentistas catalanes.

El PSOE logró situarse como primera fuerza en todas las regiones españolas excepto en el País Vasco -dominado por los nacionalistas vascos-, Cataluña -clara victoria de los independentistas catalanes- y Navarra, donde empató a dos escaños con una coalición local aunque logró menos votos.

Además, los socialistas volvieron a ganar en Andalucía, donde aunque se impusieron en las elecciones regionales de diciembre pasado, perdieron el gobierno a favor de una coalición de PP y Ciudadanos cuya investidura fue apoyado por el ultraderechista Vox.

El PP, en tanto, registró el peor resultado de su historia, con un 16,7% de los sufragios y 66 diputados, un claro desplome desde los 137 que tenía hasta ahora. Su líder, Pablo Casado, reconoció el resultado “muy malo” y lo atribuyó en buena parte a la división del voto de la derecha en tres partidos: el mismo PP, el ultraderechista Vox y el liberal Ciudadanos. “La fragmentación solo ha favorecido a un gobierno de Pedro Sánchez”, recalcó.

El PP solo ganó en la ciudad autónoma de Melilla, en el norte de África, se quedó sin representación en el País Vasco, obtuvo apenas un escaño en Cataluña y perdió su hegemonía en comunidades autónomas españolas donde había ganado todas y cada una de las elecciones desde 1977. Es el caso de Galicia, donde el PP se había impuesto en todas las elecciones democráticas en España celebradas desde la muerte del dictador Francisco Franco en 1975, o en Castilla y León, otro de sus feudos tradicionales.

El PSOE gana las elecciones en España. Foto: EFE
El PSOE ganó las elecciones en España. Foto: EFE

En tercer lugar y muy cerca del PP quedó Ciudadanos (C's), con un 15,8% y 57 diputados (antes tenían 32). El líder de C’s, Albert Rivera, subrayó este fuerte aumento y pareció dar por sentado que su partido pasará a la oposición y no pactará con el PSOE, a pesar de que ambas formaciones tendrían mayoría absoluta en el Parlamento. “Vamos a ser una oposición leal a la Constitución, a la economía de mercado, a Europa”, aseguró Rivera.

La coalición izquierdista Unidas Podemos (UP) logró el 14,3% de los sufragios, con 42 diputados, una caída frente a los 71 con que contaba hasta ahora.

El ultraderechista Vox irrumpe con fuerza en el Parlamento con 24 escaños gracias al 10,2% de votos. “Esto es solo el principio, Vox ha venido para quedarse”, aseguró su líder, Santiago Abascal, quien anunció que comienza “la reconquista” de España, un lema usado durante toda la campaña y que se alimenta de la histórica expulsión de los musulmanes de España en el siglo XV.

El partido catalán ERC, independentista de izquierda, aumenta hasta el 3,9% los votos y 15 diputados, frente a los 9 que tenía. En total, los partidos independentistas catalanes obtuvieron 22 diputados, frente a los 17 que tenían antes.

Con estos resultados, Sánchez podría lograr una mayoría de Gobierno (176 escaños) que reúna a Podemos, los nacionalistas vascos del PNV (6 diputados) y algunos partidos de izquierda de menor entidad. El presidente del PNV, Andoni Ortúzar, ofreció una “mano tendida” ante la “realidad plurinacional” del Estado español.

La participación fue del 75,58%, una de las más importantes desde el retorno de la democracia en España con las elecciones de 1977.

El diario El País de Madrid decía anoche que Ciudadanos es otro de los grandes vencedores de estas elecciones, aunque su éxito puede ser inútil. “Ciudadanos será ahora un referente aún más claro del espacio del centroderecha. Pero no ha logrado sumar en el bloque de la derecha, su gran objetivo, y no tiene margen para formar Gobierno con el PSOE porque lo prometió de forma tajante. Rivera parece abocado así a luchar por el liderazgo de la oposición con un PP en descomposición que sufrirá sin duda grandes tensiones internas”, explicó el rotativo.

Y concluyó: “El PSOE dominará pues de nuevo la política española por primera vez desde 2011, algo que nadie habría soñado en este partido hace solo un año, cuando Mariano Rajoy gobernaba y el PSOE estaba hundido en las encuestas. La situación ha dado un vuelco total desde la moción de censura de junio de 2018, que ha hundido al PP y ha abierto una guerra sin cuartel en la derecha a la vez que lograba una sintonía entre las dos formaciones de la izquierda, PSOE y Podemos, desconocida en la historia reciente de España. El guionista loco de la política española ha vuelto a dar un nuevo giro inesperado”.

Casado: “Se castigó muchísimo la fragmentación”

El líder del Partido Popular (PP), Pablo Casado, reconoció que el resultado para él ha sido “muy malo” en las elecciones de ayer domingo y lo atribuyó a la fragmentación del voto conservador, por la aparición del ultraderechista Vox y el liberal Ciudadanos.

En una comparecencia sin preguntas tras difundirse los resultados electorales, que han supuesto una debacle para el PP, partido con el que Mariano Rajoy gobernó casi siete años y que ha perdido más de la mitad de sus escaños, Casado instó a Vox y Ciudadanos a “unirse” de cara a las elecciones locales, regionales y europeas de finales de mayo. Respecto a la situación en la que queda el PP, se mostró convencido de que el partido sabrá estar “a las duras y las maduras” y anunció que empezará a trabajar hoy lunes “con ilusión y responsabilidad” para recuperar apoyos. “Se ha castigado muchísimo la fragmentación de voto”, lamentó, al advertir: “todos los partidos, también nosotros, tenemos que hacer un análisis de si ha valido la pena ese enfrentamiento con el PP”, en una recriminación directa a Ciudadanos y Vox. Recordó que propuso a esos dos partidos unirse de cara a estas elecciones del domingo, pero su oferta -reconoció- fue rechazada. El PP reunirá hoy lunes a su Comité Ejecutivo Nacional, en el que participan los presidentes regionales, para hacer un “análisis pormenorizado” de los resultados.

MÁS

Reacciones de los líderes

Rivera, la voz de la oposición: El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, dio por hecho que el PSOE gobernará en coalición con Podemos y los nacionalistas, lo que calificó de “mala noticia”, al dejar claro que su partido hará la oposición. Rivera se dirigió a sus seguidores en términos triunfalistas. Ciudadanos “se erige como la esperanza y la ilusión del futuro de España”, dijo, y adelantó que “los líderes de la oposición van a ser los diputados de Ciudadanos”. C’s contará con 57 escaños (25 más) y quedó a apenas un 0,85% en votos y a 9 diputados de alcanzar al PP (66).

Iglesias se ve en el gobierno:
 El líder de la coalición de izquierda Unidas Podemos, Pablo Iglesias, consideró que el resultado obtenido en las elecciones no es el mejor, pero sí “suficiente” para frenar a la derecha y construir un gobierno de “coalición de izquierdas” junto con los socialistas. “Ahora toca trabajar con paciencia y discreción”, aseguró Iglesias. Unidas Podemos retrocedió de tercera a cuarta fuerza en el Congreso, con 42 diputados frente a los 71 que logró en 2016; además perdió doce de sus senadores y ahora solo tiene seis.

Catalanes con más diputados:
Los independentistas catalanes lograron aumentar su presencia en el Parlamento español. Sumaron 22 escaños de los 350 que conforman el Congreso de los Diputados, frente a los 17 que habían logrado en 2016. ERC (republicanos de izquierda) obtuvo 15 diputados y Junts per Catalunya (JxC), del expresidente catalán Carles Puigdemont, siete escaños. El líder de ERC, Oriol Junqueras, exvicepresidente catalán, está en prisión preventiva desde noviembre de 2017 y en la actualidad es juzgado por el proceso secesionista.

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