Si efectivamente se produce la independencia, Cataluña tendrá una serie de desafíos que enfrentar. Uno de ellos es ingresar a Naciones Unidas (ONU).
Albert Royo-Mariné, secretario general del Consejo de Diplomacia Pública de Cataluña, dijo a El País que la comunidad internacional "acomodará" la supuesta "nueva realidad" si se concretase el secesionismo.
El pasado 30 de octubre, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo a medios españoles que "Cataluña no está entre los territorios con derecho a la autodeterminación".
Sobre este punto, el diplomático contestó: "Tampoco lo estaba Sudán del Sur o las 20 repúblicas que se independizaron en Europa hace 25 años".
"La comunidad internacional es pragmática y lo será también ahora. Me acuerdo que en 1990, el entonces secretario general de la ONU dijo que nunca se reconocería a Eslovenia y Croacia. Hoy día, ambos países son independientes y están representados en la Unión Europea y en la ONU".
Royo-Mariné señaló que un proceso "pacífico y democrático como el catalán no puede ser ignorado por el mundo civilizado".
El diplomático catalán también criticó al Gobierno español. "Se ha negado a cualquier tipo de negociación política y se limita a amenazar con suspender la autonomía de Cataluña y a perseguir legalmente a las autoridades catalanas". Y agregó: "Vamos a seguir insistiendo en Madrid para que se establezca un diálogo entre las partes".
Como principal objetivo si se llega a consolidar la independencia, Royo-Mariné cree que esta región debe "seguir apostando a las políticas de integración". En este sentido, dijo que una sociedad "tan mezclada como la catalana", debe seguir "recibiendo inmigración y mantenerse cohesionada".
Un diplomático catalán analiza la posibilidad de ser reconocido por la ONU