La cifra de muertos llegó a 36 tras el ataque con coche bomba ocurrido en la tarde del domingo. En Costa de Marfil, un ataque de una facción de Al Qaeda acabó con la vida de 16 personas.

La policía turca detuvo este lunes en Sanliurfa a cuatro sospechosos de estar vinculados con el atentado con coche bomba que el domingo en Ankara mató a 36 personas, informó la agencia de prensa progubernamental Anatolia.

La policía efectuó esa redada en función de la información de que el coche utilizado en el atentado había sido comprado en Sanliurfa, agregó la agencia.

La detonación de un coche bomba en el centro de Ankara causó la muerte de 36 personas, así como 125 heridos, en lo que fue el tercer gran atentado que sufre la capital turca desde el pasado mes de octubre.

Según informaciones oficiales, el artefacto explotó en torno a las 18:45 hora local en los alrededores del parque Güven, cerca de la plaza Kizilay, rodeada de una zona de ocio y comercios, no muy lejos del barrio diplomático de la capital.

El ataque aún no ha sido reivindicado.

El papa Francisco ha calificado de "atroz acto de violencia" el atentado, informó este lunes la Santa Sede.

El sumo pontífice transmitió sus condolencias al pueblo turco en un mensaje enviado al presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, firmado como es habitual por el secretario de Estado vaticano, el cardenal Pietro Parolin.

En la misiva, Francisco se dice "profundamente apenado" por las "injustas y trágicas pérdidas humanas causadas por las bombas" en el ataque terrorista, el tercero masivo en el centro de la capital turca desde octubre.

En el mensaje, el Papa asegura al pueblo turco su "cercanía espiritual y solidaridad" y afirma que reza tanto "por el eterno descanso" de las víctimas y de sus familiares, como "por la recuperación de los afectados por este atroz acto de violencia".

Finalmente, Francisco reconoce "el generoso servicio" que han prestado las fuerzas de seguridad y emergencia de país e "invoca bendiciones divinas de paz, curación y fuerza sobre la nación".

Un comando de hombres fuertemente armados dejó 16 muertos el domingo tras un ataque contra varios hoteles de una zona turística de Grand-Bassam, al este de Abiyán, en un acto calificado de "terrorista" por el presidente marfileño Allassane Ouattara.

Posteriormente, Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) lo reivindicó, según SITE, una organización estadounidense que hace seguimiento de los sitios islamistas en internet.

AQMI señaló que "tres héroes" perpetraron el ataque y prometió brindar más detalles más tarde, según SITE. El presidente marfileño habló de "seis terroristas neutralizados".

Por sus características, este ataque recuerda al que dejó 38 muertos en un hotel de Susa (Túnez) el 26 de junio, que fue reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI). Se trata del primero de este tipo en Costa de Marfil.

Los atacantes llegaron por la playa y abrieron fuego de manera indiscriminada, según varios testigos. Uno de ellos dijo que un agresor gritaba "¡Alá Akbar!" (Dios es grande).

"El balance es duro, los terroristas lograron matar a 14 civiles y hemos perdido a dos miembros de las fuerzas especiales", declaró el presidente marfileño, quien se trasladó hasta el lugar del incidente, agregando que los seis asaltantes fueron abatidos.

Al menos uno de los fallecidos es de nacionalidad francesa. El presidente francés François Hollande condenó "con firmeza este cobarde atentado", que causó la muerte de "al menos un francés entre (más de) una decena de civiles".

"Francia aporta su apoyo logístico y de información a Costa de Marfil (...) y continuará e intensificará su cooperación con sus socios en la lucha contra el terrorismo", señaló en un comunicado.

VIDEOAFP Y EFE