La ofensiva, que tenía como objetivo atacar al Estado Islámico, fue encabezada por fuerzas kurdo-sirias apoyadas por Estados Unidos. Francia dirigió ataques en Irak.

Al menos 71 personas murieron este martes en distintos ataques en el norte de Siria y en la parte oriental de Aleppo.  56 civiles perdieron la vida en ataques aéreos de la coalición contra el Estado Islámico encabezada por Estados Unidos en el norte de Siria.

Lo refirió el Observatorio Nacional para los Derechos Humanos, el que informó que entre las víctimas se encuentran 11 niños y adolescentes. Los ataques fueron al norte de Manbij, localidad en manos del Estado Islámico pero asediada desde hace más de un mes por las fuerzas kurdo-sirias apoyadas por EE.UU.

Además, al menos 15 personas murieron en ataques aéreos gubernamentales sirios en la parte oriental de Aleppo, fuera del control de las fuerzas del régimen de Damasco.

Lo refirió el canal Al Arabiya, según el cual los bombardeos se concentraron en el barrio Qaterji. Desde el domingo, Aleppo está totalmente rodeada por las fuerzas gubernamentales y, según la ONU, unos 150.000 civiles tienen reservas de alimentos hasta mediados de agosto.

El ministro de Defensa francés, Jean-Yves Le Drian, anunció el lanzamiento de nuevos ataques aéreos contra instalaciones del Estado Islámico en Tall Afar, cerca de Mosul, en Irak.

"Mi sensación como ministro de Defensa -dijo a los micrófonos de France Info- es que se debe seguir atacando al corazón, atacar al corazón significa atacar el santuario del Estado Islámico en Siria y en Irak. Atacamos todos los días. Francia en Medio Oriente ataca todos los días".

TERRORISMOANSA Y AFP