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¿Champán o vino espumoso? El conflicto entre Rusia y Francia por esta bebida

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Champaña rusa. Foto: AFP

LEY

El Kremlin creó una ley que prohíbe denominar como champaña a las bebidas extranjeras. Solo las nacionales podrán ser comercializadas con ese nombre.

El Kremlin defendió la polémica ley que obliga a los productores de champán a renunciar a esta denominación en Rusia, donde tendrán que identificar sus vinos simplemente como "espumosos".

"Esta historia de las denominaciones es muy vieja, es una historia que venía de los tiempos soviéticos. La ley ha sido aprobada, debe cumplirse", declaró hoy el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.

La ley establece que en Rusia solo se podrá vender champaña "producida" en el país, donde desde la época de la Unión Soviética se vendía un vino espumoso nombrado "Champaña Soviética".

Peskov señaló que "la vinicultura rusa es una rama de la economía que se desarrolla muy rápidamente y con mucha calidad, pese a la situación de crisis".

"Es una rama compleja de la economía y no genera dinero rápido. El proceso empresarial es largo: es muy complejo desde el punto de vista tecnológico, toma mucho tiempo, y sin embargo, esta rama se desarrolla bien y claro está, debe ser y será apoyada por todas las vías", afirmó.

Además, según esta normativa promulgada el pasado viernes por el presidente ruso, Vladímir Putin, las importaciones de champaña tendrán que ser etiquetadas como "vino espumoso".

La respuesta de Francia

Las casas de champán francesas pidieron el lunes ayuda diplomática por esta nueva ley rusa. Y es que según estimaciones del Centro de Investigaciones de los Mercados Federal y Regionales de Productos Alcohólicos (TSIFRRA, por sus siglas en ruso), Rusia importa anualmente cerca de 50 millones de vinos espumosos y champañas, el 13% de los cuales proceden de Francia.

Los productores franceses se benefician de una denominación de origen controlada, que se supone que les da el uso exclusivo de la palabra "champán" en los países que se adhieren al Acuerdo de Lisboa sobre indicaciones geográficas distintivas. Pero Rusia no firmó este acuerdo. 

Por eso, podrán seguir utilizando la palabra en francés, pero también tendrán que escribir "vino espumoso" en cirílico en la parte posterior de las botellas, una herejía para estas marcas.

Los productores "piden a los diplomáticos franceses y europeos que obtengan la modificación de esta ley inaceptable", dijo en un comunicado el Comité de Champán, que agrupa a los viticultores y productores de la región de Champagne, en el noreste de Francia.

Denunció una medida "escandalosa" que "cuestiona más de 20 años de conversaciones bilaterales entre la Unión Europea y Rusia sobre la protección de las denominaciones de origen controlada".

Moët Henness, propiedad del conglomerado de lujo LVMH, dijo el domingo que cumpliría la ley y reanudaría las exportaciones de sus marcas, entre ellas Dom Perignon, Moët & Chandon y Veuve Clicquot, "lo antes posible".

En tanto, el gobierno francés recalcó este martes que el champán solo se produce en la región de Champaña, que le da nombre a la bebida.
 
"La posición de Francia es muy clara: la palabra champán viene de esa región francesa donde se produce y que tiene una denominación de origen", afirmó el ministro francés de Agricultura, Julien Denormandie.

En una entrevista con la emisora Sud Radio, Denormandie reconoció que siguen "muy de cerca" la situación con la autoridades rusas, dentro de una "batalla de años" en defensa de esa denominación.

"Hace mucho que estamos trabajando con los rusos en esta situación y seguiremos haciéndolo", añadió el titula francés de Agricultura.

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