El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, criticó ayer las restricciones impuestas por Austria y varios países de los Balcanes al paso de refugiados y les urgió a abrir sus fronteras. Según Ban, esas limitaciones incumplen la convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951 y están creando "una situación difícil en Grecia".

"El secretario general es totalmente consciente de las presiones que sienten muchos países europeos. Sin embargo, llama a todos a mantener sus fronteras abiertas y a actuar con espíritu de compartir responsabilidades y solidaridad", dijo su portavoz, Stéphane Dujarric. En ese sentido, reclamó también "expandir las vías legales para acceder al asilo", y recordó que la gran mayoría de refugiados son acogidos por países en desarrollo.

"Hay una verdadera necesidad de compartir responsabilidades a nivel global", dijo Ban a través del portavoz, que recordó que ese asunto estará en el centro de una cumbre internacional convocada para el próximo septiembre en Nueva York. El jefe de la ONU señaló en particular su "gran preocupación" por las limitaciones impuestas en esa ruta de los Balcanes.

Ban apuntó que el número de demandantes de asilo que llegan a Grecia sigue sin reducirse y que los cierres fronterizos están creando un "situación difícil" en el país heleno. EFE

Preocupación en ONU