MIAMI
La protesta de exiliados cubanos en Miami ocurrió el día después de una inédita protesta pacífica de más de doce horas frente al Ministerio de Cultura, en La Habana.
Decenas de manifestantes exigieron en Miami la libertad del rapero cubano Denis Solis, encarcelado en la isla, y mostraron su apoyo a la manifestación en la isla de los jóvenes artistas del Movimiento San Isidro (MSI) que terminó con la detención del “influencer” cubano Alexander Otaola, organizador de la protesta, más tarde liberado.
Los manifestantes del exilio cubano en Miami se congregaron frente al icónico restaurante Versailles, de la Calle Ocho, con girasoles en las manos, banderas cubanas y estadounidenses y camiseta con las siglas MSI.
Entre las personas que exigieron la libertad del rapero y disidente cubano, condenado a ocho meses de prisión por “desacato”, estaban el activista Ramón Saúl Sánchez, líder del Movimiento Democracia; los concejales Joe Carollo y Manolo Reyes, varios “influencers” de las redes sociales, la líder de Cuba Decide, Rosa María Payá, y el grafitero conocido como El Sexto, reportó la televisión local AméricaTevé.
Altercado
Según declaró Ramón Saúl Sánchez, el origen de un "altercado" con la Policía fue que el expresentador de la televisión cubana Edmundo García, partidario del Gobierno comunista de la isla, se presentó allí “para provocar”.
“Hicimos una cadena humana exigiendo la liberación sin cargos de Otaola y otros detenidos; entre nosotros y la Policía siempre ha habido mucho respeto”, afirmó.
Poco tiempo después, el concejal Esteban Bovo anunció en Twitter la liberación de Otaola. "Miami apoya al pueblo cubano que exige la #libertad!”, escribió.
Los presentes en ese sitio histórico donde habitualmente se congrega el exilio cubano en Miami, gritaron consignas a favor del MSI y de los artistas e intelectuales en Cuba que protestan contra el régimen de la isla y exigen libertad de expresión.
Igualmente, pidieron el cese al acoso al artista plástico Luis Manuel Otero Alcántara, y la profesora de arte Anamely Ramos, así como de los integrantes del MSI.
La protesta de exiliados cubanos en Miami ocurrió el día después de una inédita protesta pacífica de más de doce horas frente al Ministerio de Cultura en La Habana, donde unos 300 artistas e intelectuales cubanos reclamaban un canal de diálogo con el Gobierno de la isla, al que exigen el cese de la censura y la represión.
Se trató de una concentración histórica en un país que prohíbe de facto las manifestaciones.