El presidente concurrió a visitar a algunas de las familias afectadas por la crecida del río Uruguay. En las audiencias previas a la reunión de mañana lunes, los ministros recibieron una serie de 150 reclamos.

El presidente Tabaré Vázquez se reunió en la tarde del domingo con algunas de las familias afectadas por la crecida del río Uruguay, que en Artigas tuvo una actividad muy destructiva. Particularmente afectó la actividad de las personas que se ganan el sustento fabricando ladrillos.

A las 32 familias que aun viven fuera de sus hogares por la crecida, el gobierno anunció que dispondrá de los fondos necesarios para construir rápidamente viviendas de emergencia.

Además, el Estado contratará a 40 ladrilleros a quienes pagará salarios mensuales y los pondrá a reparar viviendas afectadas por las inundaciones que necesitan revoque, pintura y otras mejoras, dijo el presidente.

Otro anuncio estuvo vinculado a la atención de salud. En ese sentido, 
Vázquez dijo que se firmó un convenio con la mutualista local para destinar una cama de tratamiento intensivo a pacientes de ASSE.

Además de los mencionados por Vázquez, se lograron algunos otros objetivos pedidos por los artiguenses como una sede para la policlínica de Guayubirá y el apoyo policial para bajar el porcentaje de infracciones y accidentes de birrodados.

A los ministros se le plantearon una serie de 150 reclamos, en las audiencias previas a la realización del Consejo de Ministros de este lunes con la presencia de Vázquez.

En la jornada dominical, el ministro de Ganadería Tabaré Aguerre se reunió con 27 productores y les dijo que se hacen gestiones para el pago de US$ 50 millones por los negocios con Venezuela.

“Me felicito haber propiciado el acuerdo y me felicito que Pili haya exportado porque no hacía ninguna desde noviembre de 2014. ¿Si es preocupante la situación de Pili hoy, cual sería si no hubiéramos generado ese flujo comercial con Venezuela?”, reflexionó.

A su vez, Aguerre adelantó que se estudia una flexibilización de las medidas tomadas en su momento para impedir el ingreso de la enfermedad del muermo al país. Esta enfermedad afecta a los equinos y ha obligado a las autoridades sanitarias de Uruguay a prohibir el desplazamiento de animales en un área de 50 kilómetros a partir de la frontera con Brasil.

Aguerre dijo que se está reviendo la situación y que se va a exigir para que haya movimientos de equinos una certificación sanitaria que diga que los animales están libres de la enfermedad.

LA PREVIA DEL CONSEJO DE MINISTROS