En Montevideo 1 de 3 vive por debajo de línea de pobreza.

Uruguay fue seleccionado por Naciones Unidas para encabezar un programa de atención a niños en situación de calle. Por eso el INAU organizó en la tarde de ayer en la Casona de "Mauá", en la calle Juan Carlos Gómez de Ciudad Vieja, una consulta con algunos de los 1.100 menores de edad que reciben el cuidado del Estado porque pasan algunas horas del día a la intemperie.

En Montevideo, uno de cada tres niños está en un hogar por debajo de la línea de pobreza, y la pobreza es un indicador de expulsión del niño a la calle.

Esa dinámica social promueve a la vez que se vaya alejando de la escuela, por lo cual los especialistas afirman que los centros educativos también deben incorporar al niño, ver de qué manera será mejor incluirlo en el sistema.

En 2006 había cerca de 3.000 niños y adolescentes durmiendo en las calles. Una década después, el censo realizado por el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) reveló que ya no queda ninguno en forma permanente, pero se reconoce que hay muchos que, en tramos de cada jornada, deambulan o se radican en las calles, en parques o plazas.

Cuando el año pasado las Naciones Unidas instaron a los países miembros a elaborar documentos para trabajar la temática, Uruguay fue el primero en responder y eso lo convirtió en el lugar piloto para desarrollar una política que se espera pueda ser replicada en otros países de todo el mundo.

"Uruguay empezó el trabajo en noviembre del año pasado, y ahora estamos en consultas para diseñar la política; luego se implementará, evaluará y a fines de 2019 será enviada al Comité de Derechos del Niño de ONU", explicó ayer Fernando Rodríguez, vicepresidente del INAU.

La política a implementar, agregó el jerarca, "no nace de cero, sino que se basa en unos 30 años de experiencia que tiene al respecto el instituto".

Los resultados de la consulta realizada ayer serán insumo clave para la elaboración de una política pública con acciones focalizadas en redondear estrategias para brindar más pronta y mejor respuesta a esa población de niños y jóvenes directamente atendida en la actualidad. En lo que se ha propuesto, los asistentes sociales han destacado tres ejes con objetivos diversos pero complementarios: lograr la participación de esos niños y adolescentes en los encuentros y actividades a presentarles, también apoyarlos en el acceso a bienes culturales así como al uso de los espacios públicos, y el ingreso o retorno a la educación y el trabajo.

El Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) anunció que a través de 20 proyectos que se presentarán a nivel de todo el territorio nacional, se trabajará para proporcionar una orientación a los países de Naciones Unidas interesados en el desarrollo de estrategias para la prevención y respuesta a niños de la calle.

UNA INICIATIVA DE LA ONU