El gobierno uruguayo asumirá hoy la presidencia pro témpore del Mercosur con el objetivo de avanzar hacia que el bloque no esté tan "aislado", según dijo el canciller Rodolfo Nin Novoa días atrás.

Un impulso en las negociaciones para un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea, y el visto bueno del flamante presidente argentino Mauricio Macri para permitir acuerdos bilaterales por fuera del bloque, hacen tener al menos cierta esperanza de que el Mercosur podría ingresar en una nueva etapa.

Los ministros de Relaciones Exteriores del Mercosur tuvieron una reunión previa ayer en Asunción, Paraguay, que hoy preside el bloque, y coincidieron en "darle un vuelco al Mercosur en el sentido de retornar a sus orígenes, darle mayor preeminencia a lo que significa el artículo primero de nuestro Tratado de Asunción, libre tránsito de bienes, servicios y mercancías", dijo en una rueda de prensa el canciller paraguayo, Eladio Loizaga.

Los ministros de los cinco países miembros analizaron la decisión aprobada en Brasil de revisar aquellas "medidas económicas que hacen especialmente referencia a todo aquello que implique una aplicación de barreras no arancelarias y arancelarias que de alguna manera retrasan un poco la consecución de una zona de libre comercio".

Otro de los temas tratados versó sobre la creación de un tribunal de revisión permanente que funcione como órgano de solución de las diferencias que surjan entre los miembros, y que asegure la institucionalidad del bloque. "Buscamos un tribunal de revisión permanente, como órgano de solución de diferencias, que se constituya cuando un Estado parte lo requiera, una garantía jurídica al Mercosur", declaró Loizaga.

La agenda de los cancilleres en la mitad de la reunión también tocó el tema del intercambio de ofertas comerciales entre el Mercosur y la Unión Europea (UE), que todavía no tienen fecha.

"El Mercosur ya tiene su oferta hecha, ya tiene transmitida a la UE la decisión política de iniciar este intercambio de ofertas. Ahora está en manos de la UE", dijo Loizaga. Las negociaciones llevan más de dos décadas con una interrupción, y los mayores problemas para avanzar se encuentran en la liberación de los aranceles agrícolas que no tiene punto de acuerdo.

asume presidencia