La Justicia condenó a un preso que extorsionó a otros 50 reclusos, tras probarse que recibió esa misma cantidad de giros a través de redes de cobranza de parte de familiares de internos que estaban alojados en el Comcar.
El fallo del Tribunal de Apelaciones de 2° Turno, redactado por el ministro Daniel Tapie, confirmó una sentencia del juez penal Huberto Álvarez. El preso fue condenado a seis años de penitenciaría por un delito continuado de extorsión.
El tribunal sostiene que "como acertadamente lo señala el fiscal del caso (Gustavo Zubía) quien está privado de libertad en estas circunstancias y sus familiares, tienen sobrado temor de declarar la realidad por la existencia de represalias".
Varios testigos declararon en el expediente penal que amenazados por el preso, enviaban giros periódicos de entre $ 500 y $ 8.000. El dinero era cobrado por la excuñada del imputado.
Para escapar a la pena de extorsión, el recluso declaró que los múltiples giros que recibía obedecían a que se dedicaba a la venta de marihuana y pasta base dentro de la cárcel. El tribunal no le creyó.
EXTORSIONES EN COMCAR