CEMENTERIOS URUGUAYOS
Un sepulcro solitario y sin flores; nadie sabe quién está enterrado.
Un sepulcro solitario que quedó fuera del perímetro del cementerio ubicado entre Aceguá y Villa Noblía, permanece como gran incógnita para los viajeros que pasan por el lugar.
Es una tumba olvidada, sin placa ni epitafio que identifique al muerto ni la fecha de su deceso. Varias hipótesis han tejido los lugareños.
Gleney Palermo, vecino de Noblía, sostiene que "esa tumba es de un militar que fue muerto por contrabandistas de frontera, quedó tirado ahí, y ahí mismo lo enterraron".
El nombre del militar se perdió en el olvido.
Otros vecinos del municipio afirman que no son de una persona, sino de un animal que había sido de alta estima de su dueño, los restos que están sepultados bajo el montículo.
"De un caballo eran", aseguró Antonio de Souza. "Por eso no permitieron enterrarlo en camposanto, sino del lado de afuera, pero pegado a la tumba de su dueño que yace en el cementerio", sostuvo De Souza.
Otros lugareños afirman que "no era cristiano" el cuerpo que fue enterrado en el lugar, pero no se aventuran a precisar si era humano, animal, o "de otra especie denegada".
El municipio lo limpia.
El sepulcro del "muerto desconocido" lucía blanco y aseado en vísperas del Día de los Difuntos, pese a que no hay flores ni rastros de gente que recuerde quién está enterrado allí.
"Lo limpiamos y lo pintamos como al resto de las tumbas porque es un lugar sagrado. Ahí hay un ser, pese a que está del lado de afuera", sostuvo el funcionario del Municipio de Noblía a cargo de la limpieza.