Permanecerán allí durante tres días en protesta contra Uber; cada taxista aportó $ 150.

Ayer, desde las 18:00 horas, más de 50 taxis pararon y realizaron una marcha que comenzó en la sede del sindicato ubicada en Clemente César y San Martín y culminó en la Intendencia de Montevideo.

El objetivo fue colocar una carpa sindical en la explanada de la comuna —que permanecerá allí hasta el sábado 3 de septiembre— en reclamo por "un transporte popular, contra Uber y las multinacionales".

Una vez que llegaron al edificio de 18 de Julio y Ejido estacionaron los vehículos en una mano de la principal avenida y cortaron el tránsito.

En los días previos, integrantes del gremio trataron el tema durante el plenario sindical y decidieron aportar $ 50 cada uno por día, para sustentar los gastos que se generen durante los tres días que estará instalada la carpa sindical en la IMM.

El dinero fue recolectado en las paradas de taxis por un trabajador designado especialmente para ello. "Esperamos que circule todo el gremio por ella", expresó Antonio Diez, secretario general del Sindicato Único de Automóviles con Taxímetro y Telefonistas (Suatt).

Además de manifestarse, durante esos días los trabajadores del taxi repartirán folletos informativos y juntarán firmas "para demostrar el apoyo de la gente hacia la causa", explicó Diez. Esta vez, a diferencia de otras, el objetivo no fue ser recibidos por las autoridades municipales.

Colchones, medio tanques, garrafas, heladeritas y parlantes, eran algunos de los objetos que llevaron los trabajadores del volante para afrontar los tres días de manifestación que llevarán a cabo a partir de hoy.

En 10 minutos y con la ayuda de 5 choferes, la carpa sindical que alojará a los gremialistas quedó armada. Mientras tanto, los conductores de los más de 50 taxis que estaban cortando el tránsito en una mano de 18 de Julio permanecían con sus banderas, charlando y colgando pancartas.

"Ahora nos tocó a nosotros, pero ya les va a tocar a otros", exclamó indignado uno de los manifestantes. "Las aplicaciones nos van a dejar sin trabajo", agregó.

A unos metros, en la puerta del Palacio Municipal sobre 18 de Julio, un grupo de casi 20 inspectores monitoreaba la situación y la movilización, que hasta la noche de ayer había transcurrido sin inconvenientes.

Con respecto al proyecto de ley que envió el Poder Ejecutivo para regular las aplicaciones tecnológicas, entre ellas Uber, el secretario general del Suatt consideró que si se regula como "una nueva modalidad de servicio de transporte individual de pasajeros, estará compitiendo de forma desleal hacia el ya existente y además los taxistas verían afectado su trabajo". Asimismo, opinó que "no hay mercado para que convivan los dos servicios".

"Nosotros creemos que en otras ciudades donde el mercado es mucho mayor, funcionan los dos. Pero Montevideo es un pañuelo, es un barrio de esas ciudades y convivir sería o morirnos de hambre ambos, o que una se comiera a la otra", indicó el secretario general del Suatt.

Para imponerse frente a la aplicación, los taxis están "trabajando en mejorar el servicio", no solo para darle un auto más confortable y amplio al pasajero, sino también "para que el usuario tenga el taxi cuando lo necesita y para que no falten servicios en las horas pico", expresó Diez.

La manifestación de ayer y el posterior corte de un tramo de la principal avenida de la capital, se suma a una larga lista de protestas que han provocado un cambio en la dinámica del tránsito de 18 de Julio.

La avenida, en lo que va del año, ha sido centro de manifestación en más de 12 ocasiones.

El punto más alto se registró en junio, cuando en un lapso de 30 días ocurrieron cinco hechos que tuvieron a la avenida como protagonista: un piquete de 10 horas frente a la IMM por parte de los cooperativistas de Raincoop, los incidentes protagonizados por hinchas de Peñarol tras celebrar el Campeonato Uruguayo, una marcha contra la violencia machista y dos movilizaciones sindicales, una de la Federación de la Salud (FUS) y otra del Pit-Cnt que culminó en el Ministerio de Economía.

Luego de esos hechos, la IMM prohibió cortar las dos manos de la principal avenida, para dejar circular al menos en un tramo.

TRANCAZO