Se promoverá el estacionamiento subterráneo y el transporte limitado.

El Programa de Revitalización de la Ciudad Vieja ha promovido en paralelo un proceso para hacer un llamado a interesados en la explotación de estacionamientos subterráneos.

Una nueva ley aprobada hace pocos meses renovó las esperanzas de la Intendencia de Montevideo, que hasta ahora no pudo conseguir interesados en ese tipo de emprendimiento, como pasó en el Cordón, durante el gobierno de Ana Olivera. Lo que entonces suponía una ecuación negativa entre inversión y ganancias podría revertirse gracias a la exoneración de ciertos impuestos.

La directora de Espacios Públicos Patricia Roland anunció a El País que comenzó a rastrearse algunos sitios en donde resulte posible usar los subsuelos para construir parkings.

"La lógica es que haya estacionamientos en los bordes de la Ciudad Vieja y que dentro de ella circule la menor cantidad posible de vehículos", afirmó la arquitecta Roland.

El Proyecto de revitalización de la Ciudad Vieja fue presentado en la mañana de ayer en el Cabildo de Montevideo.

En la jornada, distintas autoridades departamentales y municipales recorrieron el barrio para presentar los planes a los vecinos y ver de cerca los lugares a intervenir y las obras que ya están en marcha.

"Vamos a empezar con poder caminar y no mirar para abajo por las baldosas rotas, y así se podrá disfrutar de la arquitectura de la ciudad, de la calidad artística", comentó el intendente Daniel Martínez, quien no ocultó un gran sueño: ver a la Ciudad Vieja completamente peatonalizada y con un transporte de pasajeros limitado, por ejemplo, a un tranvía destinado a paseos turísticos por el barrio. El propio programa de la IMM confirma la aspiración y la viabilidad de dar prioridad al peatón en la Ciudad Vieja, pero no más.

"No es posible peatonalizar toda la Ciudad Vieja, si uno piensa que lo que la sostuvo en sus peores momentos fue la city bancaria", comentó Patricia Roland a El País.

"Puede haber gente que, si no tiene chance de llegar cómodamente en auto hasta la puerta del trabajo, por ahí decida irse a otro lugar, y entonces se logra un resultado contrario al deseado. Reivindicamos que, como en su origen, en la Ciudad Vieja vivan todas las clases sociales y se realicen todas las actividades", manifestó Patricia Roland a El País.

Un tema aparte son las ciclovías ya construidas, poco utilizadas y blanco de múltiples balances negativos.

Al respecto, la arquitecta Roland sostuvo que "nada se resuelve haciendo una obra física; la gestión debe ser inmediata, continua. Y hay que domesticar al tránsito".

NUEVA CIUDAD VIEJA: LOS PLANES DE LA IMM