COVID-19
El plan de la Intendencia de Maldonado busca asegurar las condiciones sanitarias para que dichos comercios abran durante la pandemia del coronavirus.
Siguiendo la línea de lo que se aprobó para Montevideo, la Intendencia de Maldonado difundió un nuevo protocolo para la operativa de restaurantes, bares, pizzerías y casas de comida del departamento. Si bien nunca estuvo prohibido el funcionamiento de este tipo de establecimientos, la “nueva normalidad” obliga a que se tomen determinadas medidas que puedan llegar a transformar en inviables a, por ejemplo, algunos locales pequeños que deben retirar mesas con el fin de mantener las distancias adecuadas para evitar la propagación del virus.
Como ocurre en la capital del país, muchos de estos comercios han mantenido sus puertas abiertas gracias al servicio de delivery, que en general es realizado por empresas tercerizadas.
Menos mesas
El protocolo elaborado por la Dirección General de Higiene y Medio Ambiente de la Intendencia de Maldonado señala que en primer lugar deberá haber una disminución del número de cubiertos para evitar aglomeración de público. Y que las mesas tendrán que estar a dos metros de distancia. A su vez, cada una podrá tener hasta cuatro comensales, y no se permitirá el acoplamiento de otras mesas.
No se autoriza la pista de baile ni el uso de barras, mostradores o similares. Se recomienda también limitar los buffets y, en caso de existir, mantener los alimentos correctamente protegidos.
Con respecto al personal, debe realizar el recambio de ropa de calle y zapatos en forma obligatoria, utilizando el uniforme. Todos tendrán que usar obligatoriamente tapabocas. Quienes elaboren alimentos deben llevar además una cofia, guantes, e higienizarse antes lavando sus manos con agua y jabón, y aplicándoles alcohol en gel.
A su vez, los mozos deberán desinfectarse las manos antes de tomar el plato de la cocina y entregarlo al comensal, así como tener un lavado periódico de manos.
El horario de funcionamiento se limitará hasta las 2 de la madrugada.
Alcohol de la casa
Los clientes tendrán que usar el alcohol en gel proporcionado por el propio establecimiento al ingresar, luego de utilizar el baño y antes de retirarse.
También se recomienda a los comensales usar los tapabocas “la mayor cantidad de tiempo posible” y evitar el uso de dinero en efectivo.
Con respecto a las medidas higiénicas de los locales, deben contar con dispensadores de alcohol en gel en puntos estratégicos -a la entrada del salón, de los baños y en las cocinas-, al igual que jabón líquido y toallas descartables de papel.
Al igual que los manteles, se tendrán que retirar de las mesas los condimentos, centros de mesa y todo elemento que entorpezca la desinfección que deberá efectuarse cada vez que se vayan los clientes, “no permitiendo nuevos ingresos hasta que se desinfecte todo”.
El protocolo sugiere utilizar soluciones desinfectantes con alcohol al 70% y soluciones de hipoclorito de sodio, entre otros.
Además, se deberán extremar las medidas de higiene en el ingreso de la materia prima a la zona de elaboración, y lavar y desinfectar la vajilla a temperaturas mayores a 80 grados. A esto se agrega que entre cada servicio, mediodía y noche, habrá que limpiar y desinfectar “de manera intensa y frecuente”.
También ventilar el local y en caso de que se detecte entre el personal a alguien con síntomas de COVID-19, se tendrá que remitir al empleado de inmediato a un centro de salud. En este caso también debe comunicarse con la Departamental de Salud y cerrar preventivamente el local hasta tanto se realicen los tests al resto de los trabajadores y los resultados den negativo.