SORPRESIVO TEMPORAL

Calles y casas en la ciudad de Salto quedaron anegadas.

Un verdadero diluvio que se desató sobre el mediodía de ayer provocó anegaciones en diversas viviendas, corte de calles y saturaciones de bocas de tormenta, lo que llevó a la intervención del Comité Departamental de Emergencias en varios puntos de la ciudad.

El fenómeno se originó pasadas las 12:00 horas y se mantuvo hasta las 13:00 con una intensa lluvia acompañada de descargas eléctricas.

Calles y avenidas quedaron inmediatamente intransitables debido a que en pocos minutos las aguas sobrepasaron las veredas y los desagües resultaron insuficientes.

Varios vehículos con sus ocupantes quedaron detenidos en medio de la tormenta y decenas de fincas comenzaron a inundarse. En la zona céntrica el mayor perjuicio para los vecinos se constató en las inmediaciones de los arroyos Sauzal y Ceibal y, más hacia el Este, en los asentamiento de los alrededores de Barrio Artigas.

En la tarde de ayer el Instituto de Meteorología (Inumet) emitió dos alertas amarillas por tormentas y lluvias, una para Artigas, Salto y parte de Paysandú y otra para Colonia, Soriano y parte de Durazno.

En la ciudad de Rivera había anoche unas 30 personas desplazadas por efecto de las lluvias. Durante la noche del 2 de mayo se registraron precipitaciones que en algunos barrios llegaron a los 200 milímetros. Varias cañadas ubicadas en las zonas más bajas de la ciudad se vieron desbordadas, según indicó anoche a El País el secretario general de la Intendencia, Richard Sander.

En los días siguientes siguió lloviendo pero con menos intensidad. La fuerza del agua provocó un desprendimiento de tierra que llegó a dos viviendas en forma de lodo.

La Intendencia envió maquinaria pesada para atacar el problema.

Además, la comuna tuvo que asistir a varias familias y habilitar rápidamente un refugio para recibir a decenas personas desplazadas.