COLONIA

Falleció el hombre que había intentado comprar tres autos de alta gama que pertenecían al sindicalista argentino Marcelo Balcedo en una subasta, a la que había enviado a un apoderado, informó a El País el Ministerio del Interior.

La subasta se realizó en el Ballroom del Radisson Victoria Plaza el pasado 25 de marzo. En ese momento, al hombre que ganó se le comunicó que  debía pagar una seña de US$ 164.000, pero él respondió que no tenía el dinero y que pujó en representación de una persona en Nueva Palmira.

Más tarde, dijo a los investigadores de la Dirección de Crimen Organizado e Interpol que la persona de Nueva Palmira le pidió que "cuando ganara la puja en el remate" llamara a su hija y le dijera que "vaya a firmar la compra de los autos”.

Sin embargo, cuando la hija se presentó en el lugar informó a los policías que su padre -el hombre que falleció- era “un bebedor", que tenía "problemas psiquiátricos" y que carecía del "dinero para comprar esos autos”.

Mario Molina, quien fue el rematador de los autos de Balcedo y es presidente de la Asociación de Rematadores, contó a El País que se va a iniciar una "acción civil por los daños y prejuicios" después de que termine la feria judicial que se instaló por la emergencia sanitaria.

Tomaron la decisión porque no se pudo cobrar la comisión, ni la seña, pero el remate se realizó, explicó Molina. 

Consultado sobre los autos, dijo que están a la espera de la autorización de Presidencia para poder rematarlos otra vez.