Memoria y sensibilidad

El servicio Necrópolis de la IMM notificará a las familias y titulares de los nichos afectados.

Es el cementerio en donde se encuentran los restos de algunas de las personalidades más importantes de la historia uruguaya. Las familias más tradicionales tienen allí sus panteones.

El presidente Manuel Oribe lo mandó construir en el año 1835. En ese sitio está el Panteón Nacional, un lugar destinado al eterno descanso de los presidentes y las figuras fundamentales de la cultura.

El viernes, pasado el mediodía, un muro del Cementerio Central se derrumbó. Todavía no se sabe qué produjo la caída. Lo que sí está claro es que el siniestro destruyó decenas de sepulturas. Una parte importante del ala E del sector nichos quedó en ruinas.

El lugar del derrumbe da hacia el portón de la calle Carlos Viana y José María Roo. Ayer por la tarde se podían ver restos humanos, un cráneo y una tibia se observaban desde la vereda en un nicho alto.

Hasta el momento, la Intendencia no ha informado cuántos cuerpos había en el lugar y cómo va a recuperar el sitio destruido el pasado viernes. Fuentes municipales dijeron que el lunes próximo se conocerá un plan de acción a seguir después del incidente.

Tras el derrumbe, concurrió al lugar una dotación de Bomberos que confirmó que no había lesionados y que ya estaban trabajando arquitectos y funcionarios de la Intendencia.

Los técnicos municipales resolvieron delimitar la zona del siniestro y cerrar el cementerio. Hasta el próximo lunes inclusive no se podrá ingresar.

La noticia del derrumbe se conoció en la tarde de ayer. Pocos minutos después, familiares de personas sepultadas en el lugar hicieron saber su preocupación y enojo.

"Tengo a mis abuelos y mis padres enterrados en el Cementerio Central, no puede ser que estos (por las autoridades de la Intendencia) no puedan mantener ni siquiera un cementerio", dijo un hombre que llamó en la tarde de ayer a la redacción de El País.

Según informó la IMM, el servicio Fúnebre y Necrópolis está notificando personalmente a las familias y titulares de los nichos afectados.

La antigua estructura que terminó en el piso estaba construida sobre ladrillos. Las paredes vecinas, que sostienen decenas de nichos, muestran un escaso mantenimiento. A simple vista se puede ver que los yuyos que salen de los nichos se han vuelto matorrales.

También son visibles los ladrillos en el muro que rodea el cementerio. Sobre una base de piedra, la enorme pared que da a la calle Viana parece estar en malas condiciones.

Durante las últimas semanas la Intendencia realizó obras de limpieza de la fachada del cementerio. Las tareas implicaron eliminar grafitis y recuperar las paredes que dan a la calle Gonzalo Ramírez.

Debido a sus valores artísticos e históricos, hasta el pasado mes de diciembre el Cementerio Central recibió visitas guiadas por expertos en temas patrimoniales y arquitectónicos.

El sindicato municipal de Montevideo (Adeom) ha puesto el grito en el cielo por la situación de abandono de éste y otros cementerios.

"El Cementerio Central está cerrado porque es peligroso, en Adeom decíamos que la situación de estos sectores era realmente compleja. Tienen muy poco mantenimiento y son muy antiguos", declaró a El País, Valeria Ripoll, secretaria general de Adeom.

"Por suerte ocurrió en un momento en que no había nadie. Lo que hace es evidenciar la situación de estos lugares", agregó la sindicalista.

El próximo lunes se brindarán datos sobre el desprendimiento junto a informes técnicos de la situación mientras que el martes el cementerio volverá a abrir al público en general. Ripoll estima que una posibilidad es que este sector se mantenga clausurado.

En Adeom recuerdan que el 29 de noviembre del año 2015 el trabajador Oscar "Coco" Martínez murió en el Cementerio Central cuando le cayó encima la tapa de un nicho. Tenía 55 años de edad, una esposa y varios hijos. Trabajó como funcionario municipal durante 25 años. En aquel accidente otro funcionario resultó herido.

"Una tapa se desprendió por erosión y rotura de sus trabas, el compañero murió en el acto. La inspección de Trabajo del Ministerio de Trabajo clausuró la zona hasta sus reparaciones y estableció un protocolo de trabajo para la seguridad de los trabajadores y el público que concurre", recordó el dirigente de Adeom Álvaro Soto.

Luego de aquel accidente fatal el Ministerio de Trabajo ordenó la clausura del lugar hasta que se hicieran algunas reparaciones. Soto aseguró que en aquel momento la comuna no esperó que se levantara la clausura y ordenó comenzar los trabajos sin tener la autorización del Ministerio.