TRABAJADORES LLEVAN TRES DÍAS DE HUELGA DE HAMBRE

Javier Miranda anunció que el FA intercederá ante el gobierno y la firma brasilera.

A tres días de iniciada una huelga de hambre de tres de sus trabajadores, en el sindicato del gas apuestan todas sus fichas a la decisión de la Mesa Política del Frente Amplio de intervenir en el conflicto que los enfrenta con Petrobras luego que esta anunciara que pretende abandonar la distribución de gas natural.

El integrante de la Unión Autónoma de Obreros y Empleados del Gas, Alejandro Acosta dijo a El País que “estamos esperando cómo se va a concretar esta intervención del Frente Amplio para ayudar a encontrar una solución”. Es que la Mesa Política del Frente definió ayer intervenir en el conflicto que mantienen los trabajadores de MontevideoGas con la empresa Petrobras que es accionista de la primera.

El presidente de la coalición de izquierda, Javier Miranda, señaló ayer en rueda de prensa que los propios trabajadores “solicitaron que participemos o ayudemos de alguna manera en este proceso de búsqueda de soluciones, desde luego lo vamos a hacer, tanto con el gobierno y el sindicato y con todos los actores necesarios”.

Acosta señaló que no hay ningún tipo de avance con el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), de hecho, en la reunión de este lunes entre el gobierno y la empresa, la multinacional se mostró decidida a abandonar la concesión de gas natural. Según supo El País, en esa instancia, Petrobras también aprovechó para comunicar su rechazo al control obrero llevado adelante por el sindicato la semana pasada a pesar de que la Justicia lo había prohibido.

El sindicato aplicó el control obrero de más de 12 horas en la planta de distribución en el Cerrito de la Victoria y en las oficinas de Plaza Independencia de la multinacional brasileña. La medida que ya había sido prohibida por la Justicia tras un recurso de amparo presentado por la empresa, derivó en que el Ministerio del Interior a través de sus negociadores desalojase a los trabajadores.

Acosta adelantó que se continuará con la huelga de hambre de res trabajadores frente a la puerta del MIEM, hasta que haya algún avance en las negociaciones. “Vamos a seguir con la huelga y ver cómo se materializa esto del FA, a ver si hay algún avance o no”, añadió. Por otro lado, denunció que a partir de la semana próxima comenzarán a vencer los seguros de desempleo de 16 trabajadores.

Esta semana la multinacional brasileña informó al gobierno que “las nuevas directrices” consideran la venta de activos “con destaque para el segmento de refinación y distribución, incluyendo la venta integral de Petrobras Uruguay Distribución S.A, distribuidora de combustibles líquidos, lubricantes y fertilizantes líquidos, con una red de estaciones de servicio”.

Paralelamente, comunicó que como accionaria de MontevideoGas y Conecta “está pendiente de los resultados de las discusiones con el Estado uruguayo para la efectiva recomposición de la ecuación económico-financiera de las concesiones del gas natural”. Es más, en un comunicado enviado a los medios, la firma consideró que la situación de ambas empresas es “deficitaria” porque “las condiciones del mercado del gas natural cambiaron dramáticamente desde mediados de la década del 2000 por la crisis energética argentina”.

Miranda dijo en rueda de prensa que el Frente Amplio observa “con enorme preocupación la pérdida de puestos de trabajo”, así como “la afectación de un servicio público. Hay que recordar que esto es un servicio público concesionado”, señaló.

Para Miranda,la salida de Petrobras del país“obedece efectivamente a una política pública, Petrobras es una empresa estatal, lo que hay aquí es una vez más las manifestaciones de políticas económicas en particular el neoliberalismo del ministro de Economía de Brasil en este momento, donde la empresa se retira del mercado, sea chica y esto está afectando a Uruguay, sin duda”.

La semana pasada un integrante del Poder Ejecutivo dijo a El País que esta situación era previsible porque era una típica medida del presidente brasileño Jair Bolsonaro. También señaló que no había ninguna empresa nacional interesada en la concesión de gas natural.