Conflicto sindical
Ante la decisión y las medidas del sindicato, MontevideoGas sostiene que los ocho meses que ha durado la negociación demuestran su voluntad de diálogo.
MontevideoGas, la empresa que distribuye gas por cañería que es controlada por la estatal brasileña Petrobras, decidió enviar 20 trabajadores al seguro de paro y despedir a otro. Ante esta situación, los trabajadores anunciaron que realizarán una ocupación con control obrero desde el 25 de marzo si Petrobras no demuestra interés en negociar.
Por su lado, Petrobras, que depende “exclusivamente del gas natural argentino y de las incertidumbres en el abastecimiento desde allí, sostiene que es “conocida la grave situación financiera que está atravesando el sector del gas natural, que se explica por la falta de una fuente abundante, firme y competitiva de gas. Esto ha provocado un déficit estructural al servicio de distribución de gas por causas ajenas al control de la empresa y ha generado el quiebre de la ecuación económica financiera de la concesión”.
La empresa brasileña explicó en la comisión de Legislación del Trabajo de Diputados que, tras reuniones a mediados de 2018 con el ministro de Trabajo, Ernesto Murro, en las que las “máximas autoridades” de MontevideoGas expusieron la situación crítica que atraviesa la empresa y dieron a conocer “las medidas programadas para la reducción de los costos laborales, entre las que estaba la propuesta de no ajuste de salarios en el ámbito de consejo de salarios y la suspensión temporal del contrato de trabajo por parte del personal, no hubo una respuesta por parte del gobierno que brindara soluciones”.
Luego de esperar los plazos solicitados por Murro y tras no recibir alternativas por parte del gobierno, la empresa implementó medidas de reducción de costos como el seguro de paro y esfuerzos económicos para continuar con el retiro incentivado de empleados con causal jubilatoria. En respuesta a ello el sindicato “dio inicio a medidas de fuerza desproporcionadas”.
Tras firmar un acuerdo el 9 de noviembre, que proponía una tregua del conflicto hasta el 31 para negociar reducción de costos laborales u otras medidas que mitigaran las necesidades de fondos de la empresa, “no hubo propuestas del sindicato y los planteos del Poder Ejecutivo fueron inocuos, insuficientes y parciales, a la vez que se pretendía el levantamiento de las medidas de reducción de costos, sin ninguna equivalencia económica a cambio”, mientras rechazaba las propuestas por parte de MontevideoGas como el no pago del canon de la concesión.
Ante la decisión y las medidas del sindicato, MontevideoGas sostiene que los ocho meses que ha durado la negociación demuestran su voluntad de diálogo.