COMUNICADO

Hay varios integrantes del futuro gabinete que están alerta por la herencia que, afirman, recibirán de la actual administración: cientos de nuevos funcionarios que ingresaron al Estado en los últimos 15 meses y que están bajo el llamado régimen de provisoriato.

Los futuros jerarcas, como informó El País este viernes, dicen que no saben si esos funcionarios que quedarán efectivos en el ámbito público son necesarios para sus planes, y si cumplen con el perfil que aspiran los nuevos secretarios de Estado.

En la tarde de este viernes la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE) se refirió a este tema a través de un comunicado.

Entre otros, el texto afirma: u201cNi el provisoriato es una pasantía, ni la presupuestación es automática, ni se aumenta el gasto presupuestal en caso de que los funcionarios que hoy se encuentran bajo este régimen sean efectivamente presupuestadosu201d.

El régimen de provisoriato, asegura el texto, implica ingresos a través de u201cllamados públicos transparentes y abiertos, mediante concursos de oposición y méritos y/o méritos y antecedentesu201d.

u201cLos llamados para ingreso bajo este régimen, supusieron la existencia o bien de una necesidad surgida de una reorganización del inciso u organismo o bien de una vacante generadau201d, indica, y agrega: u201cEn este sentido, no hay aumento de presupuesto por concepto de retribuciones salariales ya que estos créditos presupuestales ya se estaban ejecutando dado que ya estaban planificadosu201d.

El comunicado de COFE defiende este régimen y asegura que estos trabajadores no son u201cnuevos ingresos que hereda el próximo gobierno, se trata de trabajadores y trabajadoras de todo el país, de varios Ministerios y Organismos Públicos que ingresaron a trabajar para el Estado, por concurso, y que deberán cumplir con los requisitos y condiciones antes mencionadas, para poder cambiar de modalidad de contratación, pasando a ser presupuestadosu201d.

Además, el sindicato señala que rechaza u201clas políticas de recorte al barrer, sin analizar la realidad del lugar de trabajo, la realidad del organismo y de los servicios públicos que se prestanu201d.