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En menos de una semana, seis personas murieron ahogadas en diferentes partes del territorio nacional. Este es uno de los coletazos del calor: la mayoría de los fallecidos estaba tomando un baño, en procura de hacer frente a las altas temperaturas.

Ramón Ángel López Almeida estaba pescando a orillas del río Olimar, en Treinta y Tres. Según los efectivos policiales que trabajaron en el lugar, el hombre, de 57 años, se habría desvanecido, cayendo a las aguas de dicho cauce.

El cuerpo sin vida de López fue encontrado pocos minutos después, por personas que pasaban por la playa del Parque Municipal.

Ayer por la mañana, en un tajamar de la zona de Salinas, cerca del kilómetro 87 de la Ruta Interbalnearia, encontraron el cuerpo sin vida de un hombre de 64 años.

El fallecido fue identificado por la Policía de Canelones como C.D.S.

Policías de la zona indicaron que el fallecido estaba arreando ovejas cuando una de ellas cayó al agua. El hombre se internó en el agua para rescatar al animal, pero perdió pie y falleció ahogado.

Con estos dos casos, en menos de una semana ya suman seis las personas que fallecieron ahogadas en diversos puntos del territorio nacional.

Tres de estos casos se dieron en Canelones, uno en Salto, uno en Laguna del Sauce y el otro en Treinta y Tres.

Las edades de los fallecidos en estos últimos días, oscilan entre los 14 y los 64 años.

El intenso calor reinante hizo que mucha gente se volcara a distintos balnearios y playas en todo el país. Ninguna de estas playas cuenta todavía con la presencia de guardavida, servicio que se activa habitualmente el 8 de diciembre.

"De nada nos sirve llenar las playas de carteles si seguimos nadando en zonas prohibidas para baños", señaló el vocero del comando de la Armada, capitán Sergio Bique, en diálogo con El País.

"Amén de estas zonas prohibidas, no hay aún habilitados guardavidas y no los habrá hasta dentro de un mes", sostuvo.

"Hay que tener en cuenta que nosotros sabemos nadar, pero la persona que está con nosotros puede no saber", señaló el jerarca.

Por ello, según Bique, "hay que ser prudentes a la hora de tomar un baño, sobre todo si las aguas son profundas".

Un claro ejemplo de esta situación es el fallecimiento de un adolescente de 17 años, el pasado sábado en Laguna del Sauce.

El chico, que estaba en compañía de un mayor, amigo de su padre, falleció al bañarse en una zona considerada peligrosa y no apta para baños.

Similar situación ocurrió en Salto, con un joven de 14 años que falleció el pasado 2 de noviembre al internarse en las crecidas aguas del río Uruguay.