HECHOS VIOLENTOS

El informe de Fundapro alerta por el aumento de homicidios y la falta de esclarecimientos.

Se inició el año 2018 con asaltos espectaculares, más crímenes y balaceras por doquier a lo largo y ancho de todo el territorio". Así inicia le informe de Fundapro titulado "Inseguridad en el Uruguay año 2017 y enero de 2018". La organización vinculada al Partido Colorado alerta por lo que dice es un notorio deterioro de la seguridad pública en el país.

El director de Fundapro, Guillermo Maciel, dijo a El País que es alarmante la situación que están observando por la cantidad de récords negativos. "Tuvimos un año con récord de muertes en las cárceles, segundo año record en homicidios, y record también en la no aclaración de los homicidios", explicó.

El analista de la fundación vinculada al Partido Colorado criticó al ministro del Interior Eduardo Bonomi, quien destacó la aplicación del sistema Pado de vigilancia por 24 horas en el barrio Casavalle. "Donde él dice que el Pado está funcionando a pleno es donde tenemos la tasa más alta de homicidios. Es increíble. Y vemos que la situación no tiende a cambiar, porque arrancamos el año complicado y ahora en febrero en solo cuatro días ya tenemos otros nueve homicidios", declaró Maciel de Fundapro.

El estudio explica que enero de 2018 fue para el olvido por la cantidad de casos, pero que incluso el inicio de febrero ya es más negativo.

"Más asesinatos que días es sin lugar a dudas una muy terrible tendencia", establece el documento donde se detallan los robos a comercios, las "explosiones a los cajeros automáticos, además de las cifras de rapiñas y hurtos.

Uno de los casos que destaca como preocupante es el robo al casino Maroñas instalado en el Montevideo Shopping. "Llama poderosamente la atención ya que se trata de una de las zona de la ciudad que es de las más patrulladas, vigiladas y observadas (hay embajadas, bancos, numeroso público y anteriormente en la zona aparecieron falsos artefactos explosivos) y sin embargo, delincuentes de forma muy fácil llegaron, rapiñaron y se fueron con un cuantioso botín de un poco más de $5.000.000 de pesos. Incluso ingresaron y salieron del shopping sin violentar las barreras para ingreso y egreso de los autos. Realmente insólito", destaca el informe.

Sobre los homicidios explica desde el 2012 se ha consolidado una tasa de estos delitos en forma creciente. Según el estudio de Fundapro, en 2017 se registraron 296 homicidios. "En 2017 fueron asesinadas 5,6% más personas que el año anterior. Y también según los Datos Oficiales en 2017, se podría consignar que ocurrió en promedio un homicidio cada 31 horas", dice el estudio.

A su vez destaca que el 63% de los casos, las víctimas de homicidio no tenían antecedentes penales; esto muestra que no estaban en un circuito delictivo.

El estudio compara la situación de Uruguay con la realidad de Nueva York en Estados Unidos. En esa ciudad, en 2017 registraron resultados a la baja: fueron 284 homicidios el año pasado concretando los 27 años de disminución consecutiva. Mientras el año pasado en Uruguay283 homicidios con una población de 3,3 millones de habitantes; en Nueva York se registraron 284 casos con una población de 8,6 millones.

También compara con la ciudad de Buenos Aires. "Con casi 3 millones de habitantes en el primer semestre de 2017 tuvo apenas 68 homicidios. Mientras que todo Uruguay con poco más de 3 millones de habitantes en el primer semestre de 2017 tuvo 130 homicidios", detalla el informe.

Sobre las rapiñas el estudio dice que más allá de que se intente expresar que cayó la cantidad de rapiñas y hurtos en el país, "la percepción generalizada, es que lo que cayó fue el número de denuncias de los referidos delitos, porque la gente ya acepta los mismos con resignación e impotencia".

El director de la fundación dijo que llama la atención el porqué no se ha divulgado el estudio de victimización que ya realizó el Ministerio del Interior donde se tiene la información del porcentajes de rapiñas y hurtos no denunciados.

El documento de Fundapro establece una serie de propuestas para cambiar la situación basada en experiencias comparadas como el caso de la ciudad estadounidense de Nueva York. En primer lugar remarca la necesidad de contratar más policías, y aprobar más operativos de patrullaje; también conformar una Policía Comunitaria más numérica.

A su vez, dice que es necesario sistemas computarizados para que el jefe de policía supiera dónde se desplegaban los policías. Por otro lado. propone la aplicación de la "Teoría de las Ventanas Rotas". "Vigilando fuertemente las violaciones menores de la ley para evitar delitos más graves. Y política de "stop and frisk", es decir, detener, interrogar y registrar a sospechosos", dice el informe.

A su vez establece que para cambiar la llamada situación de inseguridad que describe es necesaria una "nueva y mejor legislación".

En ese sentido, ejemplifica con reglas de la reincidencia múltiple, agentes encubiertos, infiltrados, figura del colaborador o informante, arrepentido, para lograr tener un sistema de inteligencia policial más preparado y eficiente.