SALUD

Mercedes, de 55 años, tuvo que esperar un año para recibir un stent intrarterial para tratarse un aneurisma intracerebral que no es accesible en forma convencional en el sistema de salud pública. Junto a Clara, de 67 años, fueron las dos primeras pacientes del Centro Regional de Neurocirugía de Tacuarembó (Cerenet) en utilizar hace días el nuevo angiógrafo del hospital departamental.

La intervención ocurrió en el marco de las Primeras Jornadas Internacionales de Patología Neurovascular, en las que se utilizó por primera vez este moderno equipamiento.

El angiógrafo digital es capaz de realizar toda la gama de procedimientos vasculares en neurocirugía, cardiología y el sistema vascular periférico. La intervención estuvo a cargo del equipo médico del centro de salud integrado por Alejandra Jaume, Mariana Romero y Matías Negrotto.

En todos los casos, los especialistas se capacitaron en centros de referencia de Uruguay y del exterior. En la neurocirugía, con este equipamiento es posible realizar diversos procedimientos, como la angiografía diagnóstica del árbol vascular de cuello y cerebro, tratamiento de aneurismas cerebrales, embolización de malformaciones arteriovenosas, cierre de fístulas durales o piales, e incluso la desobstrucción de arterias cerebrales para evitar un accidente cerebro vascular (ACV).

El equipo se encuentra instalado en una sala híbrida con dos block quirúrgicos inteligentes en monoblock y con un mix de alta tecnología. El Cerenet funciona desde 2001. Allí se han tratado más de 9.000 pacientes y se ha introducido más de ocho técnicas innovadoras en el país. Hoy se realizan más de 30 neurocirugías al mes; junto al servicio de Neurocirugía del Hospital Maciel. El director del hospital, Ciro Ferreira, dijo a El País que “se redobla el compromiso por seguir desarrollando una asistencia integral a los usuarios”.