La inflación en Brasil debería desacelerarse en abril frente al ritmo de los tres meses previos, pero de todos modos el banco central y su política monetaria se mantendrán vigilantes para contener ajustes de precios, dijo el jefe de la entidad, Alexandre Tombini.

Tombini reiteró que una serie de factores indican que llevar la inflación de 12 meses al centro de la meta oficial del 4,5% en 2016 es un objetivo posible.

"La política monetaria es y permanecerá vigilante para asegurar que los efectos de los ajustes de precios estén confinados a corto plazo y que la inflación converja al centro de la meta en el 2016", dijo a los legisladores del comité de asuntos económicos del Senado.

Los precios al consumidor medidos por el índice IPCA-15 subieron un 7,90% en los 12 meses hasta mediados de marzo, el mayor nivel en diez años y bastante por arriba del rango meta oficial de 2,5-6,5%.

Tombini dijo que el incremento de los precios controlados por el Gobierno, como el del combustible y la electricidad, además de la debilidad de la moneda local, han provocado una aceleración de la inflación y deberían bajar a medida que avance el año.

También afirmó que el programa diario de intervención cambiaria del banco central es importante para la estabilidad económica dado que Estados Unidos se encamina a elevar las tasas de interés.

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